Se le veía venir al chaval y parece que ya ha llegado y lo que suele pasar en estos casos, si la primera victoria se resiste y las caídas se suceden, cuando llega, las siguientes ya pasan a ser habituales. Hay quien lo compara con Pedrosa y en cierta manera tienen razón, porque Marc Márquez es muy rápido y tiene el pilotaje de los pequeños, muy técnico, pero como está creciendo todavía, su estatura será la de un piloto normal con la técnica del piloto pequeño, un cóctel explosivo.? Pero aparte de la finura de pilotaje y la rapidez que comparte con Pedrosa, Marc tiene sello propio, es muy valiente y no rehúye la lucha cuerpo a cuerpo, es más, parece que la busca para subir su adrenalina. Es realmente muy bueno cuando los carenados empiezan a chocarse en mitad de una curva y eso es algo que no se ve habitualmente y que hace disfrutar a los aficionados. Como disfrutamos con su duelo de última vuelta con Pol Espargaró en Silverstone. Pol empieza a dar muestras de nerviosismo y a cometer errores no forzados, lo que hace pensar que Marc también es bueno en la guerra psicológica.? El entorno, en un deportista tan joven, es muy importante y ahí es donde también tiene una ventaja Marc. Su mánager Emilio Alzamora conoce muy bien el camino del éxito en este deporte y sin prisas, pero sin pausa, va dirigiendo su entorno y su carrera deportiva. Y otra ventaja -que no puntúa en la pista pero si en el cache de un piloto-, son sus declaraciones en los medios, siempre precisas, sin polémicas y muy interesantes, así que también gana adeptos cuando se baja de la moto y eso le gusta especialmente a los patrocinadores. ? Atentos pues a este chaval de Lérida, tiene una fantástica escuela, cuenta con buenos profesionales a su servicio para hacer más grande su trayectoria, esconde muy buenas cartas en su manga y viene pegando muy fuerte. El futuro ya esta aquí.