La crono de Assen da la salida a una carrera abierta y montañosa en la que Ezequiel Mosquera opta a la general
29 ago 2009 . Actualizado a las 18:06 h.La Vuelta 2009, extraña y arisca, nace en el norte y puede morir en el sur. Porque la carrera arranca hoy en Assen, con una crono de 4,8 kilómetros en la catedral del motociclismo. Y posiblemente se decidirá en la montaña andaluza.
Este año el pelotón esquiva las cumbres asturianas y pirenaicas. Y parece como si la organización hubiera sucumbido a los remordimientos de conciencia derivados de la eliminación de estos clásicos. Porque, a cambio, ha incluido prácticamente todas las cimas que se ha topado en su camino. El resultado es un recorrido duro, con inicio en las traicioneras carreteras de Holanda y Bélgica, países por los que transitarán los ciclistas en las cuatro primeras jornadas, y con cinco finales en alto: Aitana, Xorret de Catí, Velefique, Sierra Nevada y La Pandera. Quizás la meta más cruel sea la del alto de Velefique, un lugar señalado para la batalla por la general.
En este escenario de cumbres alternativas pero exigentes puede encontrar su papel protagonista el gallego Ezequiel Mosquera. El jefe de filas del Xacobeo Galicia tomará la salida en la crono a las 18.17 horas. Comenzará en un terreno que no es el suyo, pero en esta edición dispondrá de menos crono y más rampas que nunca para remontar.
Para Mosquera, Samuel Sánchez y Alejandro Valverde, la Vuelta es la gran cita del año. Ninguno de los tres ha disputado una grande este temporada. El asturiano y el murciano ya han subido al podio de la ronda española, pero les falta pisar el primer escalón. La asignatura pendiente de Valverde es una carrera de tres semanas. El gallego fue quinto en la general del 2007 y cuarto en el 2008. Ninguno de los hombres que lo superaron en la pasada edición estará en Assen.
Ivan Basso y Cadel Evans, que también figuran en las apuestas, ya han afrontado este año carreras de tres semanas. El italiano, que en el 2008 cumplió su sanción, acabó quinto en el Giro y asegura que su estado de forma ha mejorado. Evans decepcionó en la grande boucle y habrá que comprobar si el traspié francés espolea o hunde al australiano. Para los dos esta carrera es una especie de reválida.
Y el único corredor participante que cuenta con un triunfo en la general es toda una incógnita: Alexánder Vinokourov. El corredor kazajo recobra su papel de jefe de filas del Astana después de su suspensión por dopaje. Los parones se pagan caros en el pelotón. Ni Armstrong salió victorioso en su regreso.