«Perdí ocho kilos antes del torneo y por eso ahora estoy tan rápido»
DEPORTES
El checo asegura que le ha venido bien ser suplente en el Liverpool, donde Houllier le hizo perder la confianza en sí mismo, para llegar a Portugal «al máximo nivel».
28 jun 2004 . Actualizado a las 07:00 h.Sus cinco goles, unidos a una gran movilidad, potencia, manejo de las dos piernas y excelente interpretación del juego, le han convertido hasta la fecha en el hombre de la Eurocopa. Baros no podía ni soñar algo así cuando acabó la temporada como suplente en el Liverpool de Gerrard Houllier (los reds le ficharon hace tres años como un diamante en bruto por seis millones de euros), después de estar medio año lesionado en un tobillo por culpa de una dura entrada del alemán Babbel en Ewood Park. Cuatro goles en la fase de clasificación, ante Holanda y Bielorrusia, le permitieron ir a la Eurocopa con la República Checa. El Maradona de Ostrava , como le apodan en la segunda ciudad más importante de Moravia, tras Brno, soñaba en que algún día le llegase este momento desde que derramó lágrimas al ver por la tele el gol de oro del alemán Bierhoff que destrozaba a sus compatriotas en la final de 1996. -¿Cómo es posible que el máximo goleador de la Eurocopa fuera suplente en el Liverpool y sólo anotara dos goles en 24 partidos la pasada temporada? -Tuve una grave lesión y después de recuperarme pude jugar algunos encuentros, aunque el entrenador decidió contar más con Owen y Heskey para el ataque y dejarme fuera. Desde la perspectiva actual veo que por una parte esa suplencia me vino bien para ahorrar energías y llegar a Portugal al máximo nivel, al servicio de mi selección. -¿Se deduce entones que no le fue nada bien con Houllier? -Me hizo perder la confianza en mí mismo, no contaba para él y llegué a pensar que lo mejor sería marcharme del Liverpool al final de esta temporada. Me encontraba bien y creía que era una injusticia, pero siempre hay que respetar a los compañeros. -¿Sigue pensando en irse? -Ha llegado un entrenador nuevo y la situación ya no es la misma porque cada jugador partirá de cero. Quiero quedarme y poder jugar con los reds al mismo nivel que ofrezco en la selección. -¿Qué sabe de Benítez? -No le conozco personalmente pero sus éxitos en el Valencia están ahí. Espero que me vaya muy bien con él. -¿Le tienta jugar en Italia o en España? -Son países donde se practica gran fútbol, con dos excelentes Ligas, equipos y jugadores grandísimos, pero en este momento sólo estoy centrado en la Eurocopa. -Volviendo a la Eurocopa, ¿cómo consiguió recuperar la confianza perdida para rendir a tan alto nivel? - Es cierto que había perdido la motivación con el Liverpool y que cuando me encontré con mis compañeros del equipo nacional gané consistencia mental. Después de una buena preparación física, perdí ocho kilos antes de la Eurocopa y por eso ahora estoy tan rápido y ágil. -Al ritmo que lleva, ¿considera posible superar los nueve goles que tiene como récord de la Eurocopa el francés Platini? -No lo sé. Es muy difícil. Son tantos... Si me llegan a decir hace seis meses que iba a anotar cinco goles en cuatro partidos de la Eurocopa, no me lo hubiera creído. De todos modos, lo que más me preocupa es que mi país esté preparado para luchar por entrar en la final. -¿Qué sensaciones conoció durante su gran partido contra Dinamarca? -Sé que todavía soy muy joven, y que hay muchas cosas por llegar, pero hasta ahora fue la mejor noche de mi vida. Marcar dos goles en cuartos de final es para estar feliz. -¿No tardaron demasiado tiempo en romper el partido ante los daneses? -Sí. Fue un partido de igual a igual durante la primera parte y hasta que no llegó el primer gol de Koller no conseguimos desequilibrar el duelo. A partir de ahí supimos jugar como en los partidos anteriores. -Y ahora Grecia, la revelación... -Dicen que somos favoritos, pero a estas alturas todos los partidos están al 50%. Los griegos han ganado a Portugal y a Francia y empataron y eliminaron a España. Eso lo dice todo. Son muy defensivos y la clave consiste en marcar el primer gol. Igual que ante Dinamarca. -¿A quién prefiere en la final del domingo en Lisboa? -Primero hay que derrotar a los helenos y luego ya hablaríamos de la final. De todos modos, es indudable que preferiría a Holanda porque ya le ganamos en la clasificación para la Eurocopa y durante la primera fase, lo que nos da mayor confianza. Los portugueses tienen grandes futbolistas, pero además juegan en casa, lo que hace que sean más difíciles. -¿Cómo consiguió la selección checa llegar tan fuerte al Europeo? -Llegamos con mucha confianza tras ganar bien la fase de clasificación y una vez aquí supimos superar todas las adversidades. Tenemos mucha fe en nuestro juego y creo que fue clave el primer partido, cuando conseguimos remontar ante Letonia en los últimos minutos. Frente a Holanda rayamos a un gran nivel y frente a Alemania demostramos que aquí todos pueden tener sitio.