El Compostela confirma su trágico final en Elche

NASO CALVO Enviado especial ELCHE.

DEPORTES

MORELL

FÚTBOL / SEGUNDA DIVISIÓN

17 jun 2001 . Actualizado a las 07:00 h.

El partido empezó como nadie lo esperaba y como hubiese firmado hasta el más optimista de los compostelanistas. El Compostela se adelantó con dos goles en el marcador y todo se puso a su favor, pero al final la fiesta fue ilicitana. La salida fue trepidante. El Elche se fue a por todas, arrancó con coraje, fuerza y velocidad. El Compos, para no ser menos, inició la final con mucha concentración y tensión. Sin arrugarse. Y buscó la contra bajo la batuta de Fabiano, otra vez maestro de ceremonias. A los nueve minutos, Gudelj dio el primer susto. En una perfecta asistencia de Fabiano, el ariete enmudeció el Martínez Valero. Iñaqui salvó al Elche. A los trece minutos, la diosa fortuna se alió con el equipo de Maric. El Apóstol sobrevoló el estadio ilicitano. Iván Rocha remató contra su propio marco y Gudelj, con la escopeta cargada, fusiló a puerta vacía. Lo más difícil El Compos hizo lo más difícil, es decir, sacudirse el dominio inicial del Elche y adelantarse en el marcador. La presión, entonces, cambió de bando. Y más cuando a la media hora de juego Jubera convirtió el recinto ilicitano en un cementerio. El centrocampista limpió la escuadra de la portería de Iñaqui con un lanzamiento de falta. Magistral. Cuando la afición local estaba cerca del infarto, Nano alimentó las esperanzas del Elche. Le dio vida al cuadro de Marcial tres minutos después de anotar Jubera. Los santiagueses apenas pudieron saborear el segundo tanto. El Compostela se metió atrás y el Elche pisó el acelerador. En la segunda parte, Marcial movió ficha y sacó a dos jugadores de refresco. Los primeros minutos fueron agobiantes para los gallegos. El conjunto gallego replegó sus líneas y se metió demasiado atrás y la insistencia del Elche tuvo su premio: Benja, en un saque de esquina, igualó la contienda. Entonces, cambió la dinámica y fue el Compos quien se lanzó al ataque, ante un Elche que empezó a defender con cinco hombres. Con más corazón que cabeza, el Compos encerró al Elche en su área. El Compos se acordó tarde de atacar. Cabarcos dispuso de un par de ocasiones, pero no acertó. La fase final del choque fue auténticamente dramática. Y acabó en drama. En tragedia. Ahora, a buscar responsables del fracaso. Se acabó el fútbol de élite en Santiago, donde ya hay luto deportivo.