Diego Taibo: «Es más difícil convencer al votante que al juez»

Noelia Silvosa
Noelia Silvosa REDACCIÓN / LA VOZ

CULLEREDO

CESAR QUIAN

Taibo encarna al candidato tipo y, aunque hace 20 años que entró en política, no dejó su profesión

09 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«Mi padre era albañil, soy hijo de obrero y en mi familia siempre se habló de política. Y quien representaba los intereses de la defensa de las clases obreras era el Partido Socialista Obrero Español», relata Diego Taibo (Culleredo, 1975). Eso y su vocación de justicia social, muy relacionada con el Derecho, le inclinaron hacia la política.

-El perfil del candidato gallego es mayor de 40 años, casado, con dos hijos y abogado. En definitiva, es usted. ¿Le sorprende?

-No del todo, porque es un perfil medio. Yo entiendo que normalmente los políticos deben de estar al lado de la gente, y por eso nosotros somos, precisamente, gente normal.

-Al final sale un perfil clásico... y masculino.

-Yo llevo en política desde los 20 años. Ahora tengo cuarenta y pico, pero también tuve 20, ja, ja. Al final lo que tiene que hacer un político es estar al lado de la gente, independientemente de la edad. Y con la ley de igualdad aprobada por Zapatero, aquel fue un año clave. Antes había un porcentaje pequeñísimo de mujeres concejalas, y evidentemente desde que se aprueba esta ley por la cual tienen que ser las listas paritarias, el incremento fue de más del cuarenta por ciento. Hay que establecer las correcciones de discriminación positiva para corregir esas involuciones históricas.

-¿Qué tiene el Derecho para relacionarse tanto con la política?

-Quizás es por el arte de intentar convencer con la palabra y no con la fuerza, por el hecho de intentar convencer a la gente. Yo creo que a lo mejor eso hace que este sea un perfil en el que cumplimos con el criterio de dedicarnos a lo que es la cosa pública.

-¿Dónde es más difícil convencer, ante el juez o ante el votante?

-Delante del votante, sin duda. Mucho más. Delante del juez llevas unos criterios jurídicos y va todo mucho más encorsetado. Al votante, que evidentemente tiene otros criterios y otra forma de escoger, es más difícil convencerlo. Y además, como decía Robespierre, los votantes siempre tienen la razón. Aunque a veces estén mal asesorados, ja, ja.

-¿Cómo empezó en esto?

-En Culleredo soy concejal desde el año 2007. Además, desde que empecé soy el portavoz del grupo de gobierno.

-¿Por qué dio el salto?

-Bueno, mi padre es albañil, soy hijo de obrero, y en mi familia siempre se habló de política. Y evidentemente, quien representaba los intereses de la defensa de las clases obreras era el Partido Socialista Obrero Español. Siempre tuve una vocación muy de justicia social hacia los colectivos más desfavorecidos. Desde la facultad siempre estuve colaborando con ellos. Pienso que para poder transformar la sociedad y mejorarla, que es lo que queremos, eso se hace desde las instituciones.