La única apuesta firme en el ferrocarril pasa por la alta velocidad

E. E. A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

29 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La relación de la ciudad con el ferrocarril es extraña. A Coruña cuenta con estaciones y vías férreas con conexiones con el área metropolitana y el resto de ciudades gallegas, pero una parte de esa infraestructura se oxida sin que se vea su futuro, apostándose en exclusiva por la llegada de la alta velocidad. Los AVE son una demanda histórica que comunicarán A Coruña con Madrid en competencia con el avión. Los enlaces con Santiago, Pontevedra y Vigo por un lado, y Ourense por otro, ya sacan hoy coches de la carretera porque el servicio es más rápido y más económico si en el automóvil viaja solo una persona.

Sin embargo, faltan otros asuntos relevantes por solucionar. Entre ellos destacan las conexiones con Ferrol y Lugo, dos líneas imposibles en la actualidad por las malas frecuencias y los tiempos decimonónicos que emplean. Hay planes, pero siempre a largo plazo, para ir haciendo algunas mejoras, pero la renovación del trazado Ferrol-A Coruña, por ahora, sigue sin fecha.

Tampoco la tiene el tren de cercanías para el que desde hace años se encargan estudios y que defienden colectivos y partidos para aprovechar la red y las estaciones ya existentes en el entorno metropolitano coruñés.

Entre las necesidades ferroviarias más imperiosas figura también el enlace del puerto exterior con las redes existentes para hacer de Langosteira un servicio competitivo. El proyecto está prácticamente terminado, pero faltan por poner los 100 millones que cuesta hacerlo.