«Si desde el 'spa' le pregunto a un oncólogo qué toxicidad tiene una quimio, se cae al suelo de risa»
A CORUÑA CIUDAD
Salvador Ramos es nutricionista y director médico del spa de Loida, en A Coruña, un centro estético que ha creado un protocolo de actuación para pacientes oncológicos.
-¿Cómo se les ocurrió crear este programa?
-A requerimiento de las clientas. Venían a la peluquería y preguntaban qué podían hacer cuando se iban a someter a la quimioterapia... después se preocupaban por el linfedema o por el aumento de peso.
-Hasta que ustedes decidieron hacer un estudio para saber qué querían.
-Preparamos una encuesta con 86 mujeres y descubrimos que el 56% tenían factores de riesgo para una recaída (no hacían deporte, no comían sano...) y solo un 17% se cuidabaN bien. También descubrimos que el 80% de las mujeres tenían sobrepeso.
-Ahora tienen un programa completo y específico.
-Atendemos a las clientas-pacientes desde un punto de vista integral.
-Habrá quien crea que es un poco frívolo...
-Sobre todo algunos médicos. Si desde el spa de Loida le pido a un oncólogo que me diga qué toxicidad tiene la quimioterapia que le han puesto a una paciente, se cae al suelo de risa. Y no es así. Los últimos estudios demuestran que una mujer que hace ejercicio y come sano, que se cuida y se siente bien, tiene un 50% menos de riesgo de recaída. Si eso nos lo ofreciese un fármaco, el laboratorio que lo patentase se forraba.
-A día de hoy, ¿qué soluciones ofrecen?
-De todo tipo. Además de una dieta y un ejercicio para cada caso, tenemos tratamientos para el linfedema, las dermatitis, las alergias...
-¿Hasta qué punto es importante la estética?
-Una persona que ha pasado un cáncer no quiere estar guapa, quiere estar como siempre, sentirse ella misma y no tener que dar explicaciones o despertar compasión.
-¿Cómo ve el futuro?
-Espero que el paciente de cáncer tenga toda su información en un carné y que se pueda consultar por parte de cualquier especialista para que tenga una atención integral y mucho más efectiva.