Un mesón tropical

A CORUÑA

Eduardo Pérez

Carol y Leo aprovecharon el confinamiento para reinventar el bar Mallorca, que regentan desde hace cuatro años en Francisco Catoira, ahora rebautizado Tropicaña y especializado en cocina tropical, aunque manteniendo la pizza, el pulpo y el churrasco

14 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

En la calle Francisco Catoira hace muchos años que existe el bar Mallorca. Hay otro con este mismo nombre en Bergondo. Supongo que en su día los bautizaron con este nombre por haber estado una temporada en Baleares o simplemente porque les sonó bien. Pero lo curioso de la cafetería de los Mallos es que de un años para aquí incluía en la carta feijoada, picaña o caipiriña, platos más brasileños que mallorquines. Desde este fin de semana el Mallorca pasa a denominarse Tropicaña, un nombre que parece que va más con el estilo y el origen de sus propietarios. «El mesón lo llevaba otra persona y nosotros lo cogimos hace cuatro años. No le cambiamos el nombre hasta ahora. Aprovechamos el virus para hacer la reforma y darle un aire más tropical. Hasta tenemos loros y tucanes de verdad», comenta Carol con acento de samba. Ella y su marido Leo llevan doce años en España y está muy ilusionados con este proyecto que fusiona su cocina con la nuestra. «Durante el confinamiento empezamos a servir pizzas a domicilio y no paramos. Empezamos casi de broma y no paramos. Así que tenemos pizzas, churrasco y, entre otras muchas cosas, picaña, de ahí el nombre de Tropicaña», explica. Ahora por fin es un local brasileño, con nombre brasileño, platos brasileños… Y pulpo y churrasco.