La cárcel de Teixeiro se prepara para recibir a Igor, el ruso

R. DOMÍNGUEZ A CORUÑA

A CORUÑA

EFE / POLICÍA ITALIANA

El exmilitar serbio, considerado uno de los presos más peligrosos de España, está acusado del triple crimen de Teruel en el 2017 e Italia lo reclama para cumplir condena perpetua por otros dos asesinatos

22 nov 2019 . Actualizado a las 22:22 h.

La Guardia Civil custodia el traslado de Norbert Feher, conocido como el Igor, el ruso, a la cárcel coruñesa de Teixeiro, donde se espera su llegada este viernes procedente de la prisión de Zuera, en Zaragoza. Considerado uno de los presos más peligrosos de España, Igor está acusado del triple asesinato de dos guardias civiles y un agricultor en Teruel en diciembre del 2017 y está reclamado por la justicia italiana, ya que sobre él pesa una condena a cadena perpetua por dos asesinatos perpetrados en abril de ese mismo año, amén de múltiples cuentas pendientes por ataques sexuales y robos

El traslado hasta el penal de Curtis se está realizando en medio de importantes medidas de seguridad y después de que trascendiera las amenazas verbales lanzadas a los funcionarios, a los que el pasado verano advirtió, según publicó el Heraldo de Aragón: «Cualquier día va a tener que pasar algo importante aquí».

En la prisión maña, este exmilitar serbio de 38 años ha permanecido los dos últimos años sin prácticamente contacto humano. Los primeros 138 días no salió de su celda del módulo de aislamiento y solo ha sido visitado por una mujer italiana, al parecer una periodista. Tendrá que regresar de nuevo a Teruel dentro de cinco meses, cuando está previsto se celebre el juicio por el asesinato de los guardias civiles Víctor Jesús Caballero y Víctor Romero, y del vecino de Andorra José Luis Aranzo, a los que disparó en una casa de campo de Albalate del Arzobispo, en Teruel. Fue detenido horas después, con las armas de los agentes encima y ya cerca de Castellón, tras sufrir un accidente de tráfico. 

Así terminaba la huida de un hombre que apenas ocho meses antes de su triple crimen en España desató el temor y una intensa búsqueda en Italia. Allí se le conocía como el asesino de Budrio tras disparar a sangre fría al propietario de un bar cercano a Bolonia durante un atraco del que apenas se llevó de botín unas monedas. En su persecución, apenas una semana después, también mató a un guardia forestal que se le cruzó en su camino y dicen que era tanto el miedo que despertaba a su paso que los habitantes de la región Emilia-Romaña le dejaban comida en las puertas de su casa para que no entrase.