«¿Quién me ha robado... el kilómetro 6?»

A CORUÑA

M.R.

Usuarios habituales del paseo marítimo desvelan curiosas ausencias en la señalización

29 abr 2019 . Actualizado a las 15:50 h.

Acaba este mes de abril, ese que le robaron a Sabina. [«Quién me ha robado el mes de abril. Lo guardaba en el cajón donde guardo el corazón...»] Aunque su inseparable Pancho Varona lleva años dudando de ello: «Acusar de que te han robado el mes de abril cuando perfectamente puedes haberlo perdido es cruel. Sabina, reconoce tu despiste», le conminó en Twitter. En A Coruña, que Varona, en conversación con María Vidal, sitúa «en lo más alto del sabinismo», también se dan a veces esas desapariciones inexplicables. Así, a los caminantes habituales del paseo marítimo les falta el kilómetro 6. «Pregunta a ver si se lo ha llevado alguien...», insta Pedro, que suele recorrerlo periódicamente. Y es que, además de los más de mil esmaltes que pueden verse en las farolas del paseo marítimo, la artista Julia Ares elaboró en su día otras piezas, también esmaltes, para señalizar cada punto kilométrico.

Otro usuario apunta que no solo hay esmaltes cada mil metros, también en los medios kilómetros, aunque solo en el tramo que va desde el Oceanográfico y la sede de la Cruz Roja del Mar hasta la playa de As Lapas. El kilómetro 1 está frente a los jardines de A Maestranza, el 2 cerca del cementerio de San Amaro y el 3 en el sendero de bajada al mencionado arenal. A partir de ahí ya desaparecen las indicaciones de los 500 metros y no hay otro esmalte de este tipo hasta el kilómetro 4 en As Lagoas, poco antes de llegar a la Domus.

El misterio está entre el kilómetro 5, situado poco antes de la coraza, al lado de una de las escaleras de bajada a la playa del Orzán, y el 7, ubicado ya en Labañou, a medio camino entre la antigua sede de Padre Rubinos y el Millennium. En algún lugar de ese tramo desapareció ese esmalte con la indicación «km. 6+000». «Estaría entre el Playa y Las Esclavas», calculan los usuarios.

Julia Ares desconoce dónde puede estar esa señal y apunta que en su día pudo haber estado en alguno de los tramos de la barandilla derribada por los temporales. Sea como sea, alguien se ha llevado el kilómetro 6 y también lo ha intentando con el 7, levantado en una de sus esquinas y abollado por los golpes. 

De la hiedra al tojo

A partir de ese lugar, los paseantes melancólicos puede evocar no a Sabina sino al mítico bolero La hiedra: «Mas cuando quiero recordar / nuestro pasado / te siento cual la hiedra / ligada a mí / y así hasta la eternidad / Yo sé que estoy ligado a ti / más fuerte que la hiedra...». Y es que la hiedra trepa por esa barandilla Modelo Coruña que no ha tenido mucho éxito en otros paseos marítimos. Claro que siempre es mejor que la envuelva la hiedra que los tojos, como ocurre un poco más adelante, en la cuesta más pronunciada del recorrido.

Superado otro de los elementos icónicos del paseo marítimo como es el pulpo, está el último esmalte que señala el kilómetro 8, que también ha sido machacado y tiene claras señales de que alguien intentó llevárselo. Julia Ares detalla que estas piezas están ancladas con resina y cristal, algo que, según explica, hace prácticamente imposible arrancarlas.

Asegura también la artista que en dirección hacia O Portiño había otros dos esmaltes con los kilómetros 9 y 10, «pero me parece que tampoco están». Quizá, como dice Varona con el mes de abril de Sabina, nadie los robó, es que se han extraviado.

Cuatro esmaltes en cada una de las 305 farolas y placas oficiales por triplicado

«Eran 305 farolas, con cuatro esmaltes en cada una, pero ahora han retirado las 17 del tranvía, que me llamó el alcalde para avisarme y supongo que estarán en los almacenes municipales». Esto evoca Julia Ares de su intervención «hace más de veinte años» en el paseo marítimo coruñés. Considera que las anécdotas alrededor de esta obra darían para escribir un libro y recuerda que por una serie de hechos que no tenían que ver con su trabajo tuvo que acabar haciendo las señales de los kilómetros, y colocándolas en su sitio, en un tiempo récord. Además, en el caso del kilómetro 3, su esmalte indicador comparte espacio con una placa de bronce del Ministerio de Fomento que reza: «Paseo marítimo. Parque Torre de Hércules. Regeneración y accesos a playas». Estas placas oficiales figuran en varios puntos del trazado con otros textos, como «Paseo Marítimo de Orillamar» -este está por triplicado- o «Paseo Marítimo de la Ensenada del Orzán y Riazor».