¡Claro que sigue habiendo CTV!

Sandra Faginas Souto
Sandra Faginas CRÓNICAS CORUÑESAS

A CORUÑA

18 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando hace unos días se preguntaba mi compañero Rodri García en una magnífica crónica «¿Dónde están los CTV de ahora?» tengo que decir que sentí algo de resquemor en ese misterioso interrogante. ¿Que dónde están los Coruñeses de Toda la Vida? ¡Pues aquí mismo! Así que me dio por pensar ya no en mi árbol genealógico, en el tatarabuelo de mi tatarabuelo (que seguro que ya iba a La Solana), sino en ese no sé qué que tenemos los de esta ciudad y que seguimos heredando pase el tiempo que pase. En ese gen alterado que nos hace fácilmente identificables, de modo que he establecido un decálogo para reconocer a un CTV de hoy. Porque, aunque no se pongan el jersey sobre los hombros y no pasen una vez al día por el Obelisco, un coruñés de pro si encuentra a alguien por la calle, además de saludarlo, se para. 1. Seguimos interesándonos en ese reconocimiento, en esa ficha que sin Excel de por medio nos hace llevar la cuenta de quiénes somos y de dónde venimos. Un coruñés se para y se reconoce, nazca en la cuna que nazca. 2. Y por supuesto aún hablamos en nuestro código fantasma, que nos hace decir que quedamos enfrente de Pascual por mucho que no quede ni rastro. 3. Un CTV no se aburre nunca y será el primero en contarte que ha abierto un local nuevo, un restaurante nuevo para disfrutarlo desde el minuto uno. Y honrará al «San Juan» por encima de todas las fiestas 4. Además, hablará de la historia de Zara como si fuera la historia de la vida de su madre, con detalle, con conocimiento de causa, con el orgullo de haber pisado esa esquina de Juan Flórez antes que nadie. 5. Y, claro, a ver quién se atreve a decirle a un CTV de ahora que no sigue las tendencias, que si el bigote marcó a una generación, a esta se la reconoce por ese sport que da pedigrí. A estilo no hay quien nos gane por muchas luces que se pongan encima. 6. Vale que los coruñeses de antes paseaban, bueno, pues ahora corren. Corren mucho, corren el domingo, el lunes, el martes, el miércoles... Porque un coruñés siempre está en forma, aunque sea para correr a sentarse al sol de las terrazas. Que al calorcito nos sentimos mucho mejor 7. Y nos apuntamos a cursos de natación, de gimnasia, de pilates, de yoga en el centro cívico de turno. ¡Que sabemos sacarle provecho a lo nuestro! 8. A los CTV nos gusta debatir de las mismas cosas, llevarnos la contraria y caer en los tópicos: «¿Cuáles son los mejores churros, los de Bonilla o El Timón? ¿Y los mejores helados? 9. Y aunque las generaciones de ahora no hayan visto a Bebeto, sienten los colores del Dépor con la misma ilusión, que decir Dépor y Coruña es toda una ecuación. 10. Un CTV no da el cante, pero canta la misma canción, por ese gen alterado que hemos heredado durante siglos y que nos ha dado tanta ilusión: «Vivir na Coruña que bonitó é, andar de parranda e durmir de pé».