Estafadores que actúan como falsos técnicos continúan timando en la ciudad

Los estafadores que actúan como falsos técnicos de empresas gasísticas, eléctricas y de telefonía continúan delinquiendo en la ciudad.

Desde la Policía Nacional ya alertaron a principios de este mes de que en las oficinas del 091 «se presentaron varias víctimas para presentar denuncia por haber sido timadas por parte de dos individuos que se hicieron pasar por empleados de distintas empresas de servicios».

Pero a pesar del seguimiento que están realizando los agentes policiales, los tramposos continúan acechando a sus víctimas, en la actualidad haciéndose pasar por comerciales de una empresa de telefonía. Así, al menos tres vecinas de la ciudad fueron víctimas durante esta semana de los timadores, todas ellas residentes en el área de la calle Barcelona.

Sin embargo, «y a pesar de su refinada técnica para lograr la estafa», según fuentes próximas al equipo de investigación, «solamente lograron sacar dinero, y poco, a una de sus víctimas», señalaron estas fuentes.

El último fraude ocurrió el pasado fin de semana en la calle Alcalde Lens. Los timadores llegaron a un portal y llamaron con insistencia a una de las viviendas, «en la que reside un matrimonio de avanzada edad y con posibles económicos», señalaron.

«Mirei polo videoporteiro e non recoñecín a quen timbraba, e non lle abrín», dijo Elvira, la víctima. Pero el hombre insistió tres o cuatro veces más: «Como o meu home saíra da casa e non está ben de saúde pensei que lle pasara algo, e abrinlle».

Uso del teléfono móvil

Cuando uno de los dos estafadores llegó al piso, la mujer también le franqueó la puerta. «Díxome que era de Telefónica e que me viña a ofrecer unha rebaixa na tarifa do servizo», contó.

Que para beneficiarse de esa promoción «tiña que darlle o número de conta bancaria porque na factura solo aparecen os tres últimos números», indicó. Elvira le dijo que ella nada podía hacer y le explicó que esos temas los llevaba su marido «e que non se atopaba na casa».

El estafador no se amilanó: «Díxome que chamara o meu home por teléfono». Fue hasta su habitación, cogió el móvil y marcó el número de su esposo, «pero xa o rapaz colleume o aparato e fixo que falaba con el, pero logo souben que non o fixera», contó. Sí le dijo el defraudador que el esposo le había dicho «que lle dera diñeiro». Elvira tuvo miedo. Volvió a su cuarto y cogió 25 euros «e dinllos coa intención de que marchara». El tramposo se fue.

Pero lejos de contentarse con el pequeño botín, el hombre continúo días después llamando a su víctima. Elvira puso los hechos en conocimiento de un familiar. Este llamó al número del estafador y le amenazó con acudir al 091. Las llamadas, por el momento, cesaron.

La policía aconseja que no se abran las puertas a extraños y solicita la ayuda ciudadana

Los estafadores lograron robarle 25 euros a esta vecina de Alcalde Lens, «pero peor suerte tuvieron en otras dos viviendas de la zona a las que acudieron», dijeron fuentes próximas a la investigación.

Para evitar este tipo de fraude, desde el 091 recomiendan que no se abran las puertas del portal y del domicilio a extraños, «aunque se hagan pasar por representantes de un organismo público o de cualquier empresa de servicios». Estas empresas «suelen comunicar con antelación las revisiones y no cobran en efectivo», indicaron. Tampoco se debe facilitar ningún dato por teléfono y si se desconfía «hay que llamar al 091 o al 092».

Si los vecinos detectan a personas ajenas merodeando en los rellanos y si se desconfía de ellas hay que llamar a la policía.

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