Jerónimo Pardo es el responsable del servicio de pediatría del Chuac, centralizado en el Hospital Teresa Herrera.
-¿El programa surge por una necesidad detectada?
-Está apareciendo un tipo de paciente nuevo, antes poco frecuente en pediatría, que es el enfermo crónico y pluripatológico. Los hospitales están centrados en resolver procesos agudos y ¿cómo hacemos para reorientar la asistencia para que el niño siga escolarizado, integrado, en la mejor situación y con la mejor calidad de vida? Hay que cambiar un poco la mentalidad y desde luego implicar a todo el personal.
-Paliativos en la niñez...
-Cuidados paliativos es mucho más amplio que terminales. Se trata de mejorar la calidad de vida del paciente, lo que no excluye que al mismo tiempo busques un tratamiento curativo. Se trata de que el niño no tenga dolor y que lleve una vida lo más normal posible.
-¿Cuántos niños se beneficiarán?
-Calculamos que entre 60 y 70 pueden ser subsidiarios de recibir este tipo de cuidados.
-Pronto abrirá el hospital de día.
-Sí, para nosotros es muy importante. Todo esto es el arranque de un cambio en el modelo de atención. Intentamos buscar lo mejor para el paciente, buscamos la ambulatorización, que el niño esté el menor tiempo posible en el hospital y el máximo en su entorno. Todo forma parte de la misma filosofía.