Fueron giradas por trabajos en el parque de Oza y en la Ciudad Vieja
24 jul 2012 . Actualizado a las 07:08 h.Las 165 facturas cuyo pago cuestionó el interventor en el 2011, y que sumaban en total 6,1 millones de euros, no son las únicas que tiene sobre la mesa el gobierno local y que achaca a obras y servicios contratados por el bipartito apartándose del procedimiento establecido en la ley. Así, fuentes municipales aseguraron ayer que a lo largo de este año han recibido un giro por importe de 528.000 euros de la empresa que ejecutó la urbanización del parque de Oza, que se suma a los 792.816 euros abonados el año pasado, por lo que el sobrecoste total de los trabajos ascendería a más de 1,3 millones de euros. Un sobrecoste que, apuntan, fue negociado directamente entre los responsables municipales y la empresa sin pasar por el cauce administrativo adecuado.
Además, según el gobierno local, también se ha recibido otra factura de 1,2 millones de euros emitida por Dragados por obras en la Ciudad Vieja, siguiendo idéntico procedimiento, por lo que a los actuales concejales no les constaba la ejecución de los trabajos. En ese sentido, aseguran que en estos momentos se están realizando las comprobaciones para determinar qué obras se realizaron y si estas se acometieron correctamente. En tal caso, apuntan, tendrán que hacer frente a las facturas dado que los terceros, en este caso las empresas contratistas, no pueden hacerse cargo de pérdidas por el mal funcionamiento interno de la Administración.
Aseguran que los reparos del interventor del año pasado provienen, mayoritariamente, de obras y servicios de la época del bipartito que no se pueden dejar sin pagar y que, todavía ahora, siguen apareciendo facturas cuyo origen se desconocía y a las que habrá que hacer frente.
Versión completamente distinta ofrecen los partidos que formaban parte del anterior gobierno. Así, los socialistas atribuyeron al PP la responsabilidad sobre los repartos del interventor: «Tenemos un gobierno que no paga a las empresas ni las subvenciones», apuntan, para censurar también que «no ejecute la pobre inversión que promete» y recuerdan que en el primer semestre solo adjudicó una obra. «En resumen, un gobierno que hace lo contrario de lo que dijo. Dijo que iba a ser transparente en la labor administrativa y el interventor pone reparos. En resumen, un gobierno que gestiona mal», apuntan.
Idéntica argumentación emplean en el BNG, donde señalan que los reparos del interventor «evidencian que o goberno local do PP está a aplicar, e mesmo a intensificar, todo o que na oposición criticaba». Citan los tres modificativos de crédito «aos que recorreu só co obxectivo de maquillar a porcentaxe de execución de obras» o la adjudicación de contratos por la vía del procedimiento negociado sin publicidad. «E todo isto, cunha xestión ruinosa do Concello, que levou ao PP a solicitar un crédito gravosísimo para a cidadanía», censuran.