«El Noroeste Pop Rock se puede hacer por unos 350.000 euros»

Javier Becerra
Javier Becerra A CORUÑA/LA VOZ.

A CORUÑA

Tras lograr más de 5.600 apoyos en Facebook, han presentado a la Concejalía de Fiestas su propuesta para el festival de la playa

16 jun 2010 . Actualizado a las 12:12 h.

Salieron a la palestra el año pasado con un mensaje. Según su punto de vista, ni Raphael ni El Consorcio tenían cabida dentro del Noroeste Pop Rock. No consiguieron apearlos, pero su manifestación en María Pita logró una repercusión tal que el propio alcalde les prometió reconducir el festival. No podían prever entonces que ahora tendrían que resurgir por un motivo más negativo: el anuncio de la cancelación del festival. El grupo saltó a la Red a los pocos minutos de la rueda de prensa en la que el concejal de Fiestas, Carlos González-Garcés, lo anunciara. Dos días después, el alcalde rectificó asegurando que, pese a la crisis, el Noroeste tendrá lugar.

-¿Pensaron que iban a tener esta importancia?

-¡Que va! Nunca pensamos que iba a tener esa trascendencia ni que iba a haber una reacción tan brutal por parte de la gente.

-Han terminado en el palacio municipal. ¿Cómo les ha ido?

-El alcalde ha sido muy cordial. Creo que fue muy inteligente su estrategia de sacarse el problema que crearon con rapidez. La reunión con González-Garcés fue productiva, pero gracias a que había un técnico. El ambiente fue algo tenso.

-¿De qué hablaron?

-Le enseñamos nuestra propuesta y hablamos, sobre todo, de temas de infraestructura. Luces, sonido, aspectos de los que se podía recortar.

-El Ayuntamiento cifra el festival en 700.000 euros. Ustedes dijeron que se podía hacer con 60.000. ¿Es eso realista?

-No, no lo es. Sería realista con un escenario adaptado a un lugar pequeño. Ese sería el dinero destinado a cachés.

-Entonces, ¿de qué presupuesto estaríamos hablando?

-Menos de la mitad. El Noroeste Pop Rock se puede hacer por unos 350.000 euros.

-Proponen dos días con un cabeza de cartel potente. ¿Qué público podría arrastrar?

-Sin ser un especialista, pienso en unas 10.000 o 15.000 personas.

-A mayores, en su propuesta están dos grupos locales por jornada. ¿Existe alguno capaz de arrastrar a más de 500 personas por sí solo?

-Creo que no. Deluxe sí, pero nadie más. El objetivo es poder dar a los grupos locales una oportunidad de tocar en el mejor de los marcos posibles.

-¿Y cómo ven lo de contratar con tan poco tiempo?

-Es complicado, pero también se puede aprovechar la coyuntura actual. Los grupos están muy justos de contrataciones.

-La irrupción el año pasado de su grupo dio pie a todo tipo de especulaciones. ¿Militan en algún partido político?

-[Se ríe] Que va. Lo único que teníamos en común era el lugar de trabajo y la pasión por la música en vivo.

-También se habló de que entre ustedes había promotores musicales.

-Para nada. Al final ha quedado demostrado que somos limpios y pulcros [risas].

-¿Por qué es tan importante el festival para ustedes?

-Le damos la importancia que merece. Son muchos años y han pasado miles de personas de diferentes generaciones. El concierto en el playa es algo más que un simple concierto.

-Se les tildó de niños caprichosos, diciendo que existían cosas más importantes por las que echarse a la calle.

-Eso nos dolió, porque claro que hay cosas por las que protestar. Pero la gente no lo hace. Somos muy de discutir en un bar, pero poco de actuar. Juntarnos tanta gente en María Pita fue una sensación espectacular.

-Rechazaron a Raphael por no ser pop, cuando él fue todo un pionero del género.

-Sí, pero yo fui a ver su concierto y el 80% eran rancheras y cosas así. Igual en su momento tuvo que ver con el pop, pero ahora la realidad es que no.

-¿Y si fuera Leonard Cohen?

-Sería bienvenido.

-Tampoco es pop, visto así.

-Pues no.

-¿Eso de decir sí a los Hombres G y no a Raphael no le chirría un poco?

-Hombre, si es por gustos, a mí tampoco me gustan los Hombres G. Pero sí que entran dentro de una dinámica pop.