Los escarapotes atacan de nuevo

Gabriela Ruiz

A CORUÑA

29 jul 2009 . Actualizado a las 11:40 h.

unque este verano parece que no hay demasiados días de sol, el número de bañistas con picaduras de fanecas bravas sigue siendo una constante que aumenta imparable de un año a otro. En lo que va de verano son más de medio millar los bañistas que han acudido a diversos puestos de socorro de playas de la provincia para ser atendidos por las molestas picaduras.

Las playas de Riazor y Orzan suman 78 picaduras, frente a las 69 que hubo el año pasado por estas fechas. En Miño de las 366 incidencias que se han dado 173 corresponden a personas que han acudido a puestos de socorrismo para recibir atenciones por picaduras. Por otra parte, según datos de hace dos semanas, Arteixo lleva 180 afectados. Las playas con más incidencias son las de Oleiros, con 377 bañistas picados, frente a los 180 de la temporada anterior. Del conjunto de playas del municipio oleirense, Bastiagueiro, con 157 picaduras, es en la que se han registrado más incidentes con los escarapotes. En total, la provincia de A Coruña ronda los mil picotazos en lo que llevamos de verano.

Según declaraciones de equipos de vigilancia de diferentes concellos, la mayoría de casos que reciben son personas picadas por «escorpiones marinos». Esto se debe a que las fanecas bravas son muy complicadas de ver, ya que se entierran en los arenales de la bajamar dejando solo al descubierto los ojos y las espinas dorsales, zona donde acumulan el veneno que transmiten a los que las pisan.

Pican a pesar del tiempo

Que este año haya habido menos días de sol y mayor número de picaduras puede ser motivo de alarma para los que asocian la playa únicamente al bañador y la sombrilla. Sin embargo, aunque el tiempo no acompañe, un gran número de coruñeses no descartan aproximarse a las playas a dar un paseo por sus orillas. Quizá sea la razón de que aunque haya habido menos días de sol el número de picados no se reduzca.

En lo referente a salvamentos, las patrullas de socorro informan que no hubo ninguna de gravedad. Como todos los años abundan los cortes con conchas, esguinces, insolaciones y picaduras de diferentes insectos. Los afectados por quemaduras han disminuido, y en playas como la de Miño solo se han dado tres casos, y ninguno de ellos de gravedad.

Menos medusas

Por otra parte, el número de picaduras de medusas también ha descendido respecto a años anteriores. Solamente se ha atendido un caso en Oleiros. Esto se debe a que las medusas son seres de aguas calientes y el atlántico no presume de buena temperatura.

Protección Civil aconseja precaución y recomienda el uso de chanclas y de protectora solar.