Un fotógrafo en Cuatro Caminos. El fotógrafo está igual que siempre, pero esta zona de la ciudad cambió de forma radical. De aquel Cuatro Caminos sin centro comercial nos queda Alberto Martí Villardefrancos y su infinidad de recuerdos en forma de fotografías. El retratista del siglo XX coruñés expone desde ayer en Superco una serie de imágenes que nos sitúan en los años cuarenta y cincuenta «donde se puede apreciar lo que ocurrió aquí (en referencia a Cuatro Caminos) y en barrios limítrofes como Monelos o la Gaiteira, entre otros», comenta entusiasmado. Por cierto, muy cerca del centro comercial Cuatro Caminos, donde desde ayer expone un centenar de fotos, tiene su archivo-piso-almacén-museo Martí. Hace un par de años pasé media tarde con él viendo negativos y más negativos y tuve la sensación de que aquellas estanterías eran una fuente inagotable de historias. Dice que le gustaría acabar de ordenar todo el material y realizar una gran exposición para enseñar su lado más artístico. Sí, porque además de plasmar la evolución de la ciudad Martí es autor de instantáneas que son auténticas obras de arte. Mi favorita es la del indigente tomando una cucharada de sopa caliente. En la inauguración de ayer Martí estuvo arropado por toda su familia y amigos, y se emocionó al recibir un collage de fotografías familiares y cuando el presidente de Cuatro Caminos Centro Comercial, Domingo Barba, descubrió una placa, con lo que la sala de exposiciones llevará para siempre el nombre del fotógrafo. «Tuve mucha suerte de tener buena gente a mi lado», sentencia el maestro, que ya cuenta con un espacio propio y cuyas fotografías se pueden ver diariamente en la sección Tal como éramos de La Voz.
Ayer les contábamos el ingreso en la Orden de Caballeros de María Pita de Rosalía Mera y Javier Losada y hoy les habló de otro acto en el salón de sesiones del Ayuntamiento al que acudió el alcalde y en el que también se produjo un ingreso. En este caso, el protagonista fue Xosé Antonio Fraga Vázquez , director del instituto de Monelos y presidente de la Asociación de Investigadores Ramón de la Sagra, por indicar tan sólo algunos aspectos del extensísimo currículo de este erudito coruñés que ayer añadió otra línea al mismo al ingresar en el Instituto José Cornide de Estudios Coruñeses, que dirige Andrés Fernández Albalat . «Significa mucho porque vivo aquí y es una gran satisfacción. Es un auténtico honor», comentó el investigador poco antes de entrar en el palacio de María Pita y pronunciar un discurso, contestado por el presidene de la RAG, Xosé Ramón Barreiro , en el que habló del naturalista López Seoane. «Soy biólogo y durante mucho tiempo buceé en los manuscritos de López Seoane que, precisamente, conserva el instituto, así que el tema me parece el ideal», destacó Fraga Vázquez. Al acto asistieron, entre otros, el director general de Caixa Galicia, José Luis Méndez López; el rector de la Universidade da Coruña, José María Barja; y el ex rector José Luis Meilán Gil.
Burgalés, afincado en Madrid y enamorado del mar. Me refiero a José Manuel Fonfría que hasta finales de octubre expone en la galería Xerión de la calle Modesta Goicouría, detrás del Hotel Riazor. A pesar de que vive alejado de la costa es el presidente de la Asociación de Pintores Marinistas. «El mar es su fuerte pero pinta de todo, de hecho sus cuadros de flores están siendo muy demandados», me comentan desde la sala de exposiciones.
Vaya cinco nombres. Son José Martínez Vidal , O Parrulo ; Jesús Bassoa Permuy , Eduardo Caridad Caridad , Antonio Rielo Fernández y Ángeles de la Iglesia Daviña . Son los Alberto Martí de la hostelería en el sentido de que llevan toda la vida dedicados a un sector. Esta noche será especial para ellos porque recibirán la insignia de oro de la Asociación Provincial de Hostelería por llevar en el colectivo desde su fundación, hace 30 años. Será el momento más emotivo de la fiesta que se celebrará en el complejo hostelero El Bosque y en la que se espera la presencia de más de 200 profesionales.