Un idilio permanente con los coruñeses que todavía recuerdan los desmayos producidos

La Voz

A CORUÑA

21 ago 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Lo ha dicho mil y una veces. A Coruña es una ciudad talismán para Alejandro Sanz y el Coliseo uno de sus recintos favoritos. Esa preferencia del artista se retroalimenta con sus seguidores. Algunas de las que hoy serán madres, incluso llegaron, entre gritos, suspiros y pataleos, al desmayo mismo en su adolescencia viendo en directo al andaluz.

En los años noventa, cuando el artista pegaba fuerte entre las quinceañeras, las crónicas de sus conciertos entremezclaban necesariamente lo musical y los sucesos. En su comparecencia coruñesa de 1995 más de cien personas tuvieron que ser atendidas por desmayos y lipotimias en la enfermería del multiusos.

Visita al hospital

Dentro del anecdotario de Sanz, también hay sitio para el lado más tierno. En 1992 recibió en la prueba de sonido a una madre que portaba una carta de su hija tetrapléjica. Al leer lo que en ella ponía, el cantante y acudió al hospital Juan Canalejo a visitarla. La niña no pudo contener las lágrimas de la emoción.