Y ya son diez años de aquel ascenso

luis conde LUGO / LA VOZ

CDLUGO

AGENCIA LOF

La tanda de penaltis ante el Cádiz provocó el salto del Lugo a la Segunda División

25 jun 2022 . Actualizado a las 20:33 h.

El viernes se cumplieron dos años de un hito histórico del Lugo: el ascenso a Segunda División. Y todo fue épico, y es que el entonces equipo dirigido por Quique Setién consiguió dar el salto de categoría en una tanda de penaltis que puso a prueba los corazones de los sufridos aficionados albivermellos.

Todo parecía estar de cara para aquel equipo de leyenda, que una semana antes del 24 de junio del 2012 se había impuesto en el partido de ida en el Ángel Carro por 3-1. La ventaja invitaba al optimismo. Pero el Cádiz no estaba dispuesto a poner una alfombra rojo y facilitar el ascenso de los lucenses.

Los gaditanos certificaron un gran partido ante un Lugo, que si bien neutralizó el 1-0 marcado por Ferreiro gracias al tanto de Monti, estuvo a merced de los locales. Fue muy flojo el choque de los albivermellos, que en el minuto 63 vieron como el gol de Juanjo los ponía contra las cuerdas.

Pero aguantaron y se plantaron en una prórroga, en la que ambas escuadras cometieron más errores de los que se les presuponía a dos clubes que tenían ganado su derecho a estar en Segunda División. En este tiempo extra no hubo goles, y el choque se fue a la lotería de los penaltis. Cruel tener que jugárselo todo en esta tanda, pero el código del fútbol estipula esta hoja de ruta.

Y ahí se fraguó la leyenda de un Lugo, que tuvo aquella tarde de San Juan a Pita, Luismi y Manu como auténticos protagonistas. Porque los tres, unidos al portero Miguel Escalona llevaron al equipo albivermello a escribir una página de oro en la historia del Lugo. Los tres primeros marcaron la primera, la tercera y la definitiva pena máxima, y el guardameta lo bordó con intervenciones espectaculares.

Aquella tarde en el Ramón de Carranza, el once inicial que dispuso Quique Setién fue el formado por Escalona, Aitor, Manu, Belfortti, Pita, Rubén García, Quero, Isma, Zarandona, Manu y Belencoso. También jugaron Luismi, Berodia y Zarandona.

Quique Setién, el artífice

El artífice de aquel ascenso desde el banquillo fue Quique Setién, todo un romántico del fútbol, que sentó las bases de un proyecto sólido, que fue determinante para este éxito del que sigue viviendo el club albivermello. No hay que olvidar que la próxima campaña se cumplirán once temporadas en la Segunda División, lo que lo convertirá en el decano de esta categoría.

Nada más concluir el partido en Cádiz, desde la grada se oía por parte de la afición albivermello el «¡Quique quédate, Quique quédate, Quique quédate!». Desde ese momento, Setién pasaba a ser todo un ídolo para una afición que veía como su equipo daba el salto al fútbol profesional. José Bouso desde la presidencia y Carlos Mouriz desde la dirección deportiva habían acertado en la elección del técnico.

Clave también fue la afición albivermella, que en un buen número se desplazó a la Tacita de Plata. Ya desde primera hora de la mañana de aquel 24 de junio de 2022 los colores rojiblancos ondearon al viento en la bahía gaditana. Tensión hasta los instantes finales, nervios viendo como el Cádiz levantaba la eliminatoria, pero éxtasis total cuando Manu marcaba el penalti definitivo.

El sufrimiento entonces mereció la pena. Fueron 952 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta, pero el sacrificio mereció la pena. El ascenso estaba en el bolsillo. En Lugo, los aficionados, que disfrutaban del Arde Lucus, tiñeron las calles de rojiblanco para empujar al equipo desde la distancia

La Voz de Galicia se volcó con el hito histórico del club albivermello en la Tacita de Plata

La Voz de Galicia se volcó con aquel partido que el Lugo disputó en el Ramón de Carranza ante el Cádiz, y contó con todo lujo de detalles el ascenso histórico. Con titulares como «El Lugo regresa a Segunda» y «El Lugo hizo arder la ciudad», La Voz de Galicia reflejó la previa del partido, el encuentro, la tanda de penaltis, las reacciones y las celebraciones.

Asimismo, también contó como fue el recibimiento de una afición albivermella totalmente entregada a sus héroes y las celebraciones que tuvieron lugar en Lugo tanto en las instituciones como en el propio Ángel Carro. Sin duda, fueron noticias para la historia.