Con apenas un 35 % de posesión y un juego «práctico», el Lugo igualó sus mejores registros ofensivos y por fin dejó su portería a cero
19 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Mehdi Nafti no se esconde. En su presentación como entrenador del Club Deportivo Lugo aseguró que siempre va de frente, y tras su debut y victoria en Castalia el franco-tunecino no tuvo reparos en reconocer que había intentado que su equipo fuese «práctico». «Cuando tienes a Manu Barreiro en la plantilla, que es tan bueno de espaldas, tienes que aprovecharlo», comentó un técnico que también destacó la poca distancia entre las líneas de su equipo. «Me ha gustado que había poca distancia entre nuestros centrales y delantero», explicó, nada preocupado de que su equipo tuviese un escaso 35 por ciento de posesión.
Juanfran García también había sido pragmático hasta ahora, pero el porcentaje de tenencia de la pelota había variado entre el 50% que alcanzó en la visita al Cartagena (2-1), y el 37 en la derrota contra el Leganés en el Anxo Carro (0-2). Tener todavía menos tiempo el balón no fue un impedimento para que el Lugo igualase contra el Castellón sus mejores registros ofensivos y defensivos de la temporada. De hecho, Nafti alineó a jugones como Hugo Rama o Juanpe en las posiciones que bailaban y el equipo tuvo bastante más criterio que otros días en sus posesiones.
12 disparos
Sin asediar, el Lugo alcanzó la portería contraria con cierta facilidad, especialmente en la segunda mitad. El propio Nafti reconoció que había echado en falta un poco más de profundidad por las bandas. Pero el cabezazo a la red de Iriome, en el córner que botó Herrera en el 94, supuso el duodécimo disparo albivermello, lo que iguala su mejor registro en las cinco jornadas anteriores.
El Lugo chutó las misma veces en la derrota en Cartagonova, aunque aquel fue un partido que dejó mucho peor sabor de boca a sus aficionados porque la mayoría se produjeron en un amago de reacción final y hasta entonces el Cartagena había sido infinitamente superior, generando también once disparos.
No fue aquel, sin embargo, el día que más llegaron al área del Lugo. Eso pasó precisamente en la victoria contra el Leganés (2-1), que tiró 13 veces a portería, aunque solo obligó a intervenir a Cantero en tres de ellas. Una temporada más el navarro es uno de los guardametas con más trabajo de Segunda División, pero ante el Castellón solo tuvo que hacer una.
El cuadro valenciano chutó ocho veces en total y solo generó peligro real a balón parado, en los saques de esquina de Marc Mateu.
Sin errores graves y la portería a cero
Curiosamente, el Lugo recibió los mismos disparos, en la derrota contra el Fuenlabrada (2-0). En aquel primer partido pasaron pocas cosas y los lucenses se vieron condenados por sus errores. Esta vez, todos rindieron a un nivel alto, empezando por la zaga, y dejó la puerta a cero por fin.
Una pequeña mejoría que habría quedado en nada de no ser por el gol olímpico anulado y el posterior tanto de Iriome. La fortuna también sonrió a Nafti.
