La acumulación de arena obligó a actuar otra vez para rescatar el canal
02 ago 2023 . Actualizado a las 13:53 h.El río o canal que conecta la laguna y la marisma de Baldaio con el mar se volvió a tapar de arena y, otra vez, fue necesario reabrir esa conexión, fundamental para mantener el equilibrio del ecosistema. Se hizo ayer durante buena parte de la jornada, desde la mañana, con una excavadora recuperando el espacio que se colmata dada la dinámica de esta franja del litoral, que varía (más en unos sitios que en otros) cada año. Sobre todo en el otro lado del arenal, en Razo, donde el río que baja de Pardiñas y de Oza desemboca cada poco tiempo de una manera o de otra, generando a veces acantilado de áridos con taludes no precisamente pequeños.
En Baldaio ya hubo que abrir la arena el 28 de febrero del 2020, en medio de una gran expectación política, vecinal y de los mariscadores de la ría, también afectados si la laguna se vuelve solo dulce. Al mes siguiente, pocos días antes del inicio de la pandemia, se repitió la operación. Desde entonces el control ha sido constante, dada la importancia ecológica de este enclave, que también suma dunas y playas, y numerosas especies animales y vegetales en el humedal y en todo su entorno. La vicepresidenta segunda y conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, supervisó los trabajos, como ya había hecho en aquella primera ocasión. En esta, el nivel no era tan crítico, pero la intervención se hacía necesaria.
