Los accidentes de tráfico ocurridos en vías de la Costa da Morte se redujeron ligeramente en los últimos tres meses con respecto al mismo período del año anterior. Entre el de 1 de junio y el 31 de agosto, Protección Civil contabilizó 214 siniestros, lo que supone un 6,9% menos que en el mismo trimestre del 2009.
En este descenso han tenido una especial influencia los datos de concellos como Laxe y Vimianzo, que han registrado una reducción del 55,5 y el 50%, respectivamente, y en menor medida los correspondientes a Coristanco (-37,5%) y Cee (-16,6). En cambio, en los municipios de Carballo y A Laracha, dos de los que tienen un mayor peso en las estadísticas por su volumen poblacional, se ha producido un ligero repunte del 3,3 y 13,6%, respectivamente.
En cuanto a la distribución mensual destaca la evolución de los cifras de agosto, tradicionalmente el más nefasto para la seguridad del tráfico debido al incremento que se produce en el número de desplazamientos, sobre todo relacionados con las vacaciones estivales. Sin embargo, en esta ocasión, además de experimentar una reducción superior al 20% respecto al mismo mes del 2009, se ha situado por detrás de julio, cuando se registraron 13 siniestros más.
La distribución geográfica de la accidentalidad sigue las pautas habituales de todo el año, con un predominio de Carballo y A Laracha, junto a los concellos atravesados por la carretera comarcal AC-552, entre los que suman el mayor número de incidencias. Sin embargo, destaca la creciente siniestralidad de Cerceda, que, con 19 casos, es uno de los municipios en los que más han subido los accidentes. Precisamente en este concello se registraron de los cuatro accidentes mortales del verano. El más grave ocurrió el 3 de julio en la glorieta de O Esperón, donde un joven de Ferrol, que regresaba del festival Fresh Weekend, perdió la vida y dos de sus compañeros resultaron heridos de extrema gravedad. El otro tuvo lugar el día 23 del mes pasado, cuando un vecino de Santa Comba, de 32 años, se salió de la vía e impactó contra un poste en la carretera de A Silva a Carballo.
Antes ya habían fallecido un conductor bielorruso que colisionó de frente con su coche contra otro vehículo en la entrada de Paiosaco y un motorista cabanés, de 17 años, que cayó entre los eucaliptos de las curvas de O Rempenín.
Al margen de los siniestros mortales, se produjeron otros tres de consecuencias graves. Cuatro vecinos de Dumbría, se empotraron contra un poste en Baíñas el 16 de junio. Al día siguiente, un joven de Corme que iba con un compañero ebrio resultó herido grave, y el pasado 8 de agosto dos chicas de Vimianzo cayeron por un terraplén de seis metros en Ponteceso.