El efecto Thunberg: las aerolíneas pierden miles de pasajeros

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La activista de 16 años ha pronunciado un nuevo discurso emocionante en la sede del Parlamento Europeo

09 ago 2019 . Actualizado a las 19:29 h.

La activista sueca Greta Thunberg, impulsora del movimiento Frydays for future, ha dado un nuevo ejemplo de su firme compromiso con el cambio climático. La joven de 16 años ha aprovechado sus vacaciones de Semana Santa para viajar a Bruselas y dirigirse a los diputados del Parlamento Europeo. No es la primera vez que se enfrenta al reto de comunicar la urgencia del calentamiento global ante representantes políticos. El pasado mes de diciembre protagonizó un momento histórico en la cumbre de la ONU en Katowice (Polonia) con un discurso que emocionó al mundo entero. Greta está siendo además consecuente con lo que proclama. Realizó el trayecto desde Suecia hasta Estrasburgo en tren y no en avión, un medio de transporte que trata de evitar para reducir su huella de carbono. El impacto del movimiento que lidera ya se percibe en el país escandinavo, donde en el primer trimestre de 2019 el tráfico aéreo ha descendido en 400.000 pasajeros, una cantidad suficientemente importante para desconcertar a los dueños de las aerolíneas.  

Thunberg quiso comenzar su presentación recordando el incendio en Notre Dame para señalar que «la Catedral podrá ser reconstruida, al contrario que nuestro clima». También aludió a las previsiones científicas que aseguran que la Tierra podría entrar en el plazo de una década en un proceso de retroalimentación que alteraría el equilibrio climático.«Nuestra civilización tal y como la conocemos está en peligro. Para evitar la catástrofe necesitamos disminuir las emisiones de CO2 un cincuenta por ciento en antes del 2030». La nominada al Nobel de la Paz mencionó además el peligro que representan otros gases más potentes, como el metano. «Los cálculos son solo eso, cálculos. El punto de no retorno puede llegar incluso antes de lo previsto». Terminó su discurso llamando a la acción política, calificándola hoy de insuficiente.«Puede que me ignoren a mí pero no podrán hacerlo con los científicos y la ciencia».