Tres semanas de obras condicionan el acceso a Vilagarcía desde Pontevedra
VILAGARCÍA DE AROUSA
Covsa emprende su asfaltado entre las rotondas de Godos y Larsa, que once mil vehículos recorren cada día
07 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.En octubre, el Ministerio de Fomento anunciaba la inminente reparación de la carretera N-640A, una de las principales arterias que articulan el tráfico en Vilagarcía. En realidad, la intervención adjudicada a la empresa Covsa no hizo entonces más que cubrir una primera fase, consistente en la restauración de los tramos que se encontraban en peor estado, el sellado de las grietas y la reposición de cinco centímetros del firme. La compañía se encargará ahora de completar el trabajo, extendiendo microaglomerado en frío para mejorar la superficie de la calzada. De acuerdo con la información transmitida al Concello, en esta fase se empleará, aproximadamente, una semana. Otra más será necesaria para la consolidación de lo ejecutado, para que la firma emplee una tercera semana en la reposición de las señalizaciones y las marcas viales.
Será prácticamente un mes de obras que condicionarán notablemente la circulación en uno de los puntos más densos de la red viaria en la capital arousana. Los estudios de aforos que cada año publica Fomento indican que la intensidad de tráfico alcanza, en este tramo de la N-640, los once mil vehículos diarios. Por encima de los diez mil que, por ejemplo, soporta cada día otra de las travesías más frecuentadas de la ciudad, la avenida Rosalía de Castro, que une Carril con el centro de la ciudad.
En cuanto al alcance de los trabajos en marcha, se extienden a lo largo de casi seis kilómetros, entre la rotonda de Godos y la glorieta de Larsa. Comprenden, por lo tanto, la saturada recta de Rubiáns en su conjunto. Los operarios de Covsa iniciaron ayer la reposición del firme, que se llevará a cabo en tramos cortos, obligando a alternar la circulación en uno y otro sentido.
Dos accidentes
Una vez concluya este asfaltado, el ministerio dará por concluida la rehabilitación del firme de la travesía de Vilagarcía. A partir de ese momento los responsables municipales tendrán que decidir si aceptan o no la cesión de la titularidad de la carretera. Una cuestión largamente debatida en la capital arousana, que Ravella no parece dispuesta a asumir en caso de que Fomento deje flecos pendientes. Mientras la recta de Rubiáns no se integre en la red municipal, cualquier intervención, por pequeña que sea, exigirá que el Gobierno central la autorice. Algo que reza, para empezar, en todo cuanto tiene que ver con la seguridad vial y la propia señalización.
Ayer, sin ir más lejos, la carretera fue escenario de dos accidentes de tráfico. En uno de ellos, un hombre de 78 años, que pilotaba un ciclomotor, resultó herido leve al chocar su vehículo contra un automóvil. El segundo obligó al 061 a trasladar a una mujer embarazada al Hospital do Salnés tras sufrir un alcance.