Bras Rodrigo, coodinador ejecutivo para Europa del desfile de San Patricio de Nueva York
28 ene 2019 . Actualizado a las 09:39 h.Es Bras Rodrigo Álvarez Prieto (Perlora-Carreño, 1978), nieto del gallego natural de A Pobra do Brollón Xosé Prieto Álvarez. Los amigos le llaman El celta. El maestro gaiteiro asturiano volverá de nuevo a la comarca de A Mariña para actuar este sábado en Burela y presentar un nuevo trabajo, A pause in New York, ecléctico como lo define pues bebe de distintas tendencias musicales. Un título que también nos da una pista sobre su otra faceta, más internacional, como coordinador-ejecutivo para Europa del famoso Desfile de San Patricio de Nueva York, del que también habla en estas líneas. El segundo disco hace ese guiño a la ciudad de los rascacielos y tiene como antecesor el de Xermandía, con el que en 2005 el músico iniciaba su aventura musical en solitario. En el 2017, Bras Rodrigo actuó, por cierto, en las fiestas de As San Lucas en Mondoñedo.
El concierto burelense será este sábado, día 2, a las 21.00 horas en el auditorio municipal. Las entradas se venden a precios de 8 (anticipada) y 10 euros. En anticipada ya pueden conseguirse a través de la web www.wegow.com.
-¿Cómo se plantea esta segunda vuelta en A Mariña?
-Rodeado de grandes amigos. Voy a contar con la colaboración y participación en el concierto de Dambara de Burela y el gaiteiro de O Carballiño Isidro Vidal. Es un concierto bastante interactivo en el que la gente lo pasa muy bien. Queda la cosa muy chula, muy guapa. Son casi dos horas. Depende de lo que me enrolle yo entre canción y canción (ríe). Es un espectaculo diferente y para nada monótono. Cada canción es de su padre y de su madre y tiene un estilo. Hay música electrónica, clásica, folk, tradicional... Hay un poco de todo.
-¿Se encuadraría usted en alguna corriente musical?
-Yo, en ninguna. Me tienen que encuadrar los que me oyen y me ven pero yo no me encuadro en ninguna corriente. Sí apuesto por nuevos materiales, el gore-tex en los fuelles (antiguamente eran de piel de cabrito o de oveja), el plástico en la caña o incluso en los punteros. Con la evolución nos quitamos problemas como el de la humedad. Si partimos del purismo purismo, hoy no habría habido ni gaita porque a alguien se le ocurrió hace miles de años ponerle un fuelle a una flauta y el que lo puso pensó... ‘¡qué gran innovación!’. Creó un instrumento nuevo. Yo hago músicas del mundo partiendo siempre de la base, de la música que yo mamé, la música celta. Así hago principalmente lo que me gusta.
-La verdad es que tanto Asturias como Galicia son una verdadera potencia en cuanto a la gaita.
-Hay gaiterazos en Asturias y en Galicia, de quitarse el sombrero.
-A pause in New York lo publicó en 2017. ¿Tiene ya la mente puesta en futuros proyectos?
-Pues sí. Vamos a hacer una segunda reedición de ese disco y vamos a meter temas nuevos. En uno de ellos busco un poco los orígenes del celtismo y vamos a hacer un videoclip en Marruecos buscando los orígenes celtas en el norte de África. En otro, también aprovecho que la Panamá Band cogió un tema mío y lo hizo en ‘galego’.
«Hay ‘gaiterazos’ tanto en Asturias como en Galicia, de quitarse el sombrero»
«Fui el que dio visibilidad a la cultura celta del noroeste peninsular en Estados Unidos»
-Recuerdo que La Reina del Truébano de Navia fue un año al desfile de San Patricio.
-Sí, los llevé yo. Soy director y fundador también de la Banda de Gaitas de Corvera, que hace este año veintiún años. Y en el año 2015 participamos por primera vez en el desfile de San Patricio de Nueva York y el comité organizador quedó tan contento que me nombró a mí coordinador-ejecutivo para Europa del mismo. El cargo no es remunerado. Al contrario, tienes que poner dinero, pagarte tu viaje, etcétera. Yo facilito un poco la logística para que las bandas puedan participar en este gran desfile de marzo. Llevo bandas asturianas y gallegas y también de otras comunidades.
-Sin duda, la presencia de esas bandas habrá sido toda una gran sorpresa en la cita neoyorquina...
-Fui el que dio visibilidad a la cultura celta del noroeste peninsular en los Estados Unidos, que por los irlandeses y escoceses tiene una cultura celta impresionante. Sí, quedaron flipados. Hay estudios de la Universidad de Oxford, del genetista Bryan Sykes por ejemplo, en el que dice que los celtas no son de Centroeuropa sino que los celtas somos nosotros, los habitantes del noroeste peninsular que dimos el salto a Irlanda y luego volvimos a entrar otra vez por Europa y eso está recogido en un libro suyo que se titula La sangre de las islas. Hizo un estudio genético y resulta que los celtas... ¡somos nosotros! En el noroeste peninsular, te lo voy a decir en gallego, es donde más ‘loiros’ hay del mundo, donde más rubios, más ‘roxos’ hay. Ni en Irlanda ni en Escocia ni tampoco en ningún lado. Es aquí.