El Concello pierde el 10% de las ayudas por población, según el alcalde
04 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La baja de oficio de 78 reclusos de la prisión de Bonxe del padrón municipal de habitantes de Outeiro de Rei, ordenada por Estadística, reaviva la polémica de si los internos de las cárceles gallegas deben de incorporarse o no al padrón. El alcalde de Outeiro de Rei, José Pardo Lombao, insiste en que la normativa es clara y todos aquellos que vayan a permanecer en la penitenciaría seis meses o más deben de ser dados de alta. El no hacerlo supone, según aseguró, que el concello preste servicios de agua y de recogida de basuras, entre otros, a una población que oscila entre las 400 y las 500 personas, pero que no contabiliza a la hora de recibir las ayudas estatales, de la Xunta o provinciales.
Según el regidor de Outeiro, la no inclusión en el padrón del 10% de la población, que es lo que suponen los reclusos, priva a las arcas municipales de la parte proporcional de los fondos que le corresponden por los servicios que presta.
El alcalde de Outeiro ha llevado esta polémica a la Fegamp, donde ya existe un grupo formado por todos los concellos gallegos en los que hay prisiones, afectados por este mismo problema, que repercute en buena medida en las arcas municipales. En Lugo son los de Outeiro de Rei y Monterroso. El regidor del ayuntamiento chairego asegura que ya denunciaron públicamente en varias ocasiones esta situación, pero no por ello hubo soluciones en forma de compensación.
Pardo puso como ejemplo que durante el reparto de los fondos del Plan E, repartidos en función de los padrones, Outeiro de Rei recibió 800.000 euros, cuando si computaran los reclusos de Bonxe, esta cantidad ascendería a 880.000 euros. «É un prexuízo -apostilló- moi importante para os concellos».