«Dá a sensación de que se empeza a mover algo no mercado inmobiliario». Las declaraciones proceden del presidente de los promotores lucenses, David García Vilela, quien insiste en que desde hace unas semanas se acercan más potenciales clientes a las oficinas de las promotoras para interesarse por precios y condiciones de las viviendas. El mercado se empieza a mover, en un momento en el que se conocen las primeras estimaciones de lo que representó la caída de la demanda en los precios durante el último año. Se barajan varios porcentajes, según sea la fuente de referencia. Los promotores lucenses dan por válido un descenso en el último año del 12,5%, lo que de alguna forma viene a dar la razón a las voces autorizadas del sector que auguraban que la bajada de los precios iba a ser menor de la que se esperaba y que gangas en el mercado se iban a encontrar más bien pocas.
Los clientes vuelven a peregrinar por las oficinas de las inmobiliarias y de las constructoras, que en los últimos meses recibían escasas visitas. Sin embargo, de momento, no se está notando en las ventas. Lugo cerró el primer trimestre con 771 operaciones de compraventa de pisos, según datos del Colegio de Registradores de la Propiedad.
Pocas gangas
Las gangas se encuentran, pero puntualmente y de la mano de constructores con serios problemas de liquidez a los que no les queda más remedio que malvender, o de las subastas de viviendas embargadas que realizan los bancos. En la capital lucense, por ahora, ese fenómeno es minoritario, en relación con lo que está ocurriendo en otras ciudades más grandes en las que los bancos tienen ahora más existencias que cualquier inmobilidaria. Los clientes también son conscientes de ello y especialmente aquellos que estuvieron esperando para invertir sus ahorros en ladrillo, activo que consideran más seguro que los productos de los bancos.
Quienes están buscando un piso para comprar son ahora mucho más selectivos que antes. El descenso en los precios apenas es perceptible, especialmente en zonas en las que escasea la vivienda nueva, como es el casco histórico lucense. Fuentes consultadas aseguran que los precios de los pocos edificios que conforman la oferta no han variado su precio en los últimos meses. Menos de 3.000 euros el metro cuadrado es bastante difícil encontrar algo que reúna unas determinadas condiciones.
Escasa oferta
Lo cierto es que en las zonas vip de Lugo poco hay donde elegir. Se está construyendo en el fondo de la plaza de España, en la rúa da Raíña y poco más. En zonas como San Fiz, llamada a ser la mayor concentración de viviendas de los últimos años, las obras están prácticamente paradas y la oferta reducida.