El Consejo de Ministros aprueba la partida para agilizar los trabajos en La Escrita, que hoy visitará José Blanco
19 jun 2009 . Actualizado a las 02:02 h.El Consejo de Ministros aprobará hoy una propuesta de Fomento para acelerar las obras que lleva a cabo en la sierra de La Escrita, en la que el 20 de febrero quedó cortada la autovía A-6 como consecuencia de un desprendimiento. El ministerio dará a conocer a lo largo de esta jornada las características de un proyecto de actuación urgente, que contempla una inversión de 34,7 millones de euros.
A falta de conocerse los detalles concretos, tras los análisis de los geólogos y los ingenieros, llegaron a la conclusión de que la única solución al problema es actuar en varios niveles. Por una parte, Fomento contempla ahora retirar una gran cantidad de tierra y piedra de la parte alta de la montaña con el fin de reducir el peso y paralizar el deslizamiento de la ladera. El siguiente paso será impermeabilizar toda la zona que quede al descubierto, tanto arriba como en el lateral. Por último, los técnicos proponen hormigonar las cunetas y demás canalizaciones del agua para evitar que se filtre, y aplicar un asfalto especial.
Desde hace varios meses está siendo desmontada desde arriba toda la parte inestable de la ladera, trabajos que implican bastantes riesgos debido al peligro de nuevos desprendimientos. A media mañana de hoy el ministro de Fomento, José Blanco, tiene previsto desplazarse hasta el lugar y conocer personalmente la situación y hablar con los trabajadores.
Las difíciles condiciones meteorológicas del pasado invierno reavivaron la inestabilidad de la montaña, que algunos técnicos compararon con un queso gruyer. La ausencia de una roca compacta facilita que el agua se filtre al interior, reblandeciendo la tierra y aumentando considerablemente la presión. Por otra parte, cuando las temperaturas son muy bajas, el hielo que se forma ejerce de cuña.
Desde noviembre hasta marzo pasado las nevadas fueron especialmente frecuentes en la cadena montañosa que separa las provincias de Lugo y León. También contribuyeron a agravar la situación las lluvias de la primavera que, si bien para esa época la zona de los desprendimientos en el talud ya había sido protegida con plásticos, dificultaron las obras en la cima del monte.
Fomento reconoció recientemente que hasta hace una semana había bajado la intensidad de los trabajos debido a las lluvias. Sin embargo, según los datos que proporcionó, una veintena de máquinas de todo tipo están funcionando en el talud de forma ininterrumpida las 24 horas del día, habiendo retirado ya 85.000 metros cúbicos de material.