Los rellenos del último siglo en la ría ocuparían 240 campos de fútbol

FERROL

Las construcciones cubren 2,4 millones de metros, han cambiado las corrientes y facilitan que se acumulen lodos

14 ago 2009 . Actualizado a las 11:37 h.

Unos 2.370.000 metros cuadrados, cerca del 10% de la superficie total de la ría de Ferrol, fueron rellenados entre el siglo pasado y lo que va del XXI. La superficie equivale a la de 240 campos de fútbol.

En ese espacio se han levantado industrias e infraestructuras. Pero se ha pagado un precio. Los científicos de la Estación de Bioloxía Mariña de A Graña y los biólogos de los pósitos de Ferrol y Barallobre afirman que algunos han sido muy perjudiciales, porque han interrumpido las corrientes y facilitado la acumulación de lodos de los vertidos de aguas fecales que anegan la ría. La cofradía de Barallobre ha detallado los más importantes en un informe.

Puerto exterior. Ocupa unos 550.000 m2 y tapa cerca del 50% de la boca de la ría, impidiendo la renovación del agua que ha perdido calidad. Destruyó zonas de reproducción de peces y crustáceos. Los biólogos temen sus efectos a largo plazo.

El puerto. Fue ampliado en 180.000 m2, a los que hay que sumar 80.000 m2 de la dársena del carbón. Los científicos sostienen que ambas obras han ayudado a arruinar A Malata.

«As Pedras» de Caranza. Junto con los rellenos de Navantia, los biólogos afirman que este dique de los años 40 arruinó la ensenada de Caranza. En los 70 se hizo a su lado un relleno con material de obra de Esteiro.

Navantia Ferrol. Su ampliación hacia la ensenada de Caranza obligó a entubar el río Tronco, convertido en una cloaca.

Ensenadas de A Malata y A Gándara. Sufrieron diversos rellenos de importancia variable que han hecho desaparecer, por ejemplo, la Punta Arnela que da nombre al recinto ferial.

As Pías. Solo 340 de sus 2.000 metros dejan pasar el agua. Los escombros que tiró en 1998 el Discoverer Enterprise , que siguen ahí, están llenos de mejillones que ahogan el banco de almejas, el mayor de la ría.

Ponte do tren. Es de 1912, ocupa 11.000 m2 y el agua solo pasa por 180 de sus 800 metros. Bloquea el fondo de la ría, ahogado por los lodos fecales y el material que arrastra el río Belelle.

Megasa. En los 90, la empresa hizo un relleno de 100.000 m2 en el fondo de la ría con escoria de fundición. Para los biólogos es una «fonte constante de contaminación» por metales pesados ya que «non está sellado».

San Valentín. Entre los 60 y los 70 se ganaron 100.000 m2 al mar en esa zona de Fene para construir viviendas para trabajadores de la antigua Astano.

Navantia Fene. El astillero fue ampliado de los años 50 a los 70. Se ocuparon 750.000 m2 de ría.

Rampas de Barallobre y Maniños. Miden 140 metros, pero se les atribuye el enfangamiento de la playa de Barallobre.

Reganosa. Se rellenaron unos 125.000 m2 que están ubicados parcialmente sobre el banco marisquero de Santa Lucía.