La crisis hace que se desplome la confianza en Zapatero y su Gabinete

ESPAÑA

Los ciudadanos suspenden la gestión del presidente y de 14 de los 17 ministros, según el CIS

02 ago 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

La crisis económica, esa que Rodríguez Zapatero, contra toda evidencia, lleva meses empeñado en negar, ha acabado por estallarle en las manos con toda virulencia. Por primera vez en sus poco más de cuatro años en el poder, los españoles suspenden claramente la gestión del presidente. Y a la práctica totalidad del Gobierno. Lo que, traducido en términos electorales, sitúa al PP a tan solo dos décimas del PSOE en intención de voto, la distancia más corta desde que los populares perdieron las elecciones del 2004, según el último barómetro del CIS, correspondiente al mes de julio.

El Ejecutivo no ha sido capaz de aguantar ni el tirón de sus primeros cien días. En tan solo tres meses ha dilapidado la confianza de los españoles, ya que en el barómetro de abril era acogido favorablemente por un 54% de los ciudadanos. En julio, solo tres (Fernández de la Vega, Carme Chacón y Rubalcaba) de los 17 ministros merecen el aprobado. Y entre ellos no figura ninguno de los nuevos, con los que Zapatero pretendía afrontar la desaceleración e impulsar la recuperación económica desde un nuevo modelo productivo menos dependiente del ladrillo.

Solbes también suspende

Resulta especialmente llamativo el suspenso del vicepresidente Pedro Solbes, tradicionalmente uno de los miembros del Gobierno mejor valorados. El encargado de combatir la crisis económica ha acabado por pagar los platos rotos de una crisis galopante que el Ejecutivo se ha resistido a reconocer. Los buenos deseos de Zapatero han acabado por toparse con la cruda realidad del imparable encarecimiento de las hipotecas y de los combustibles, así como de la entrada en barrena de absolutamente todos los indicadores económicos. Y los españoles dan muestras de ir perdiendo su confianza en los responsables de la política económica.

No es solo que la nota de Zapatero baje hasta el 4,75, es que una amplia mayoría de los españoles (un 63,4%) muestra poca o ninguna confianza en su presidente, cuatro décimas más que octubre pasado, cuando se empezaron a apreciar los primeros indicios de la gravedad de la crisis y el presidente atravesaba su peor momento político.

La desconfianza en el presidente y su Gobierno se traducen en una caída en picado de la intención de voto hacia el PSOE, que pierde 4,36 puntos respecto a los resultados de las elecciones del pasado 9 de marzo. Justo lo contrario que el PP, que parece haber salido del bache que provocó la lucha por el liderazgo del partido, y recupera el terreno electoral perdido en estos meses para situarse al mismo nivel que en los comicios, y a tan solo dos décimas de los socialistas. Pero Mariano Rajoy no parece sacar provecho personal de la caída de Zapatero. El líder popular sigue obteniendo peor nota que el presidente y que prácticamente todos los ministros (solo supera a la responsable de Fomento, Magdalena Álvarez, y a la de Igualdad, Bibiana Aído, la peor valorada). Además, casi cuatro de cada cinco españoles confían poco o nada en Mariano Rajoy.

La vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, trató de suavizar el varapalo y se aferró al dato de que Zapatero es «el líder que cosecha más confianza», pese a reconocer que «es evidente que hay una situación económica complicada y eso contamina la percepción política».