La dualidad del mercado de trabajo

Enrique Negueruela Experto en empleo

ECONOMÍA

02 ago 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Estamos oyendo un sinfín de coros que aseguran que el problema fundamental del mercado de trabajo es la dualidad entre fijos y temporales. Muchos de ellos reclamaban una reforma laboral que pusiera fin a un escenario en el que uno de cada tres asalariados tienen contrato temporal. Resulta curioso que entre esas voces se encuentren quienes provocan esa situación.

La precariedad se produce de dos maneras: un mismo trabajador continúa con varios contratos en la misma empresa de manera irregular, o bien un mismo puesto de trabajo es desempeñado sucesivamente por varios empleados. En el primer caso, sucesión de contratos; la reforma del 2006 debería dar sus frutos. En este momento, casi un millón de trabajadores temporales llevan dos o más años en la misma empresa. En Galicia, según la EPA, son 75.200. Esta situación, más que nuevas medidas legales, requiere un trabajo de seguimiento de la Inspección de Trabajo y la Seguridad Social. Pudiendo conocer los trabajadores que llevan, con más de un contrato, dos o más años en la misma empresa, deberían adoptarse medidas para su transformación en indefinidos e imponer sanciones a la empresa por fraude. No era necesaria una reforma laboral para aplicar la ley. Lo que hace falta es decisión y vigilancia.

En las oficinas de empleo hay conocimiento suficiente sobre firmas que tienen varias plantillas que van rotando: trabajan un período y luego van al paro. Cuando se les acaban las prestaciones, vuelven a ser llamadas. Estas empresas carecen de conflictividad laboral aún con salarios por debajo de la media del sector. Quien protestaba no volvía a ser llamado y perdía su sueldo y las prestaciones que le generaba ese empleo. Estas, contributivas y no contributivas, suponían unos ingresos mayores que el sueldo en sí. Ello aseguraba unas condiciones de trabajo y salariales absolutamente beneficiosas para la empresa.

Problema no abordado

Este problema no se ha tenido en cuenta en la reforma laboral, que solo prevé que sea el trabajador quien, mediante varios contratos, continúe más de dos años en una misma empresa. En un momento de aumento de paro, esta será la política de bastantes compañías, con lo que seguiremos en la dualidad.

La precariedad tiene que ver con las retribuciones y las condiciones de trabajo. Mantener un trabajo dual es mantener un trabajo desregulado: jornadas de más de ocho horas, salarios bajos, salud laboral precaria, realización de funciones de superior categoría a la contratada...

El problema de la dualidad solo se abordará el día en que desde la autoridad laboral se obligue a las empresas a cumplir la normativa en lugar de cambiar esta una y otra vez. Un Estado de derecho es aquel en el que, además de producir normativa, los poderes públicos obligan a su cumplimiento. Es hora de que se incida en el mercado laboral utilizando los instrumentos que ya existen: cruces de información de contratos, vida laboral, Hacienda, para garantizar que ninguna empresa incumpla las normas. Después, cuando se cumplan, se puede analizar si es precisa su modificación.