El grupo asegurador Coface, que elabora una prestigiosa guía sobre el riesgo comercial de los países, ha rebajado la calificación de España desde A2 a A3, tras constatar que la crisis del crédito y el deterioro de la economía real están repercutiendo en las capacidades de las empresas de responder a sus compromisos.
No es un hecho aislado: otros 18 países han descendido de nivel (Estados Unidos, Reino Unido e Irlanda, entre ellos) y 47 quedan en situación de «vigilancia negativa», lo que lleva a pensar que en breve podrían verse degradados.
Durante el primer trimestre, los impagos empresariales se multiplicaron en España por cinco, cuando a escala mundial los incumplimientos se triplicaron. El dato se dio a conocer en la conferencia sobre riesgo país celebrada en Madrid, donde los expertos constataron que la economía española entró antes en crisis.