La producción biológica debe estar sujeta a determinados requisitos para obtener la certificación. Resumimos algunos.
La agricultura ecológica conlleva un conjunto de técnicas que excluyen el uso de productos químicos de síntesis como fertilizantes, plaguicidas, antibióticos... El objetivo es preservar el medio ambiente, mantener y aumentar la fertilidad del suelo y proporcionar alimentos con todas sus propiedades naturales. Controles de calidad. Para distinguir estos productos, todas las unidades envasadas, además de su propia marca, llevan una etiqueta numerada y un logotipo o anagrama específico con el nombre y/o el código de la autoridad u organismo de control y la leyenda Agricultura Ecológica (Ecolóxica, en el caso de Galicia). Esto supone que los elaboradores están sometidos a los controles a que obliga la ley, bajo supervisión del consejo regulador. Nutritivos y duraderos. Los alimentos conservan más nutrientes, son naturales y más sabrosos que los obtenidos por métodos convencionales. Su conservación es también más duradera.
No todos los artículos con certificado biológico que se encuentran en el mercado son producidos en la comunidad gallega. Las industrias pueden importarlos, pero para comercializarlos deben someterse a los controles del consejo regulador, que, una vez superados, autoriza el etiquetado.
