Las comunidades autónomas serán finalmente las encargadas de gestionar las ayudas que el Ministerio de Vivienda anunció para impulsar la emancipación de los jóvenes de entre 22 y 30 años, subvencionándoles el alquiler con 210 euros mensuales, en caso de que su sueldo bruto anual no exceda de los 22.000, y por un plazo máximo de cuatro años.
Así lo acordaron ayer la ministra del ramo, Carme Chacón, y los consejeros de todas las comunidades -a excepción de Madrid, que no acudió- en una reunión sectorial en la que también se dio luz verde a la demanda de Galicia para que cada comunidad pueda fijar los requisitos para otorgar la ayuda a los jóvenes que, en el caso gallego, se concretará marcando un precio máximo de alquiler de la vivienda de 480 euros, que es el límite ya fijado en el plan de alquiler que desarrolla la Xunta desde hace año y medio.
En el programa diseñado por el Gobierno y presentado por Carme Chacón, se establecía una ayuda mensual directa de 210 euros para alquiler para los jóvenes entre 22 y 30 años, siempre que su salario bruto anual no excediera de 22.000 euros -el salario medio anual de los jóvenes gallegos ronda los 13.100 euros brutos al año, según la conselleira de Vivenda, Teresa Táboas-. En lo que el ministerio no puso límite fue en el precio del alquiler para el que recibirían la ayuda, algo que a la Xunta -como subrayó Táboas- le preocupaba, pues entendía que las ayudas directas, sin ningún mecanismo de control, podrían acabar traduciéndose en inflación en el mercado de las viviendas de alquiler.
Pero el acuerdo alcanzado ayer acaba con ese temor, ya que permitirá a las comunidades autónomas que, como Galicia, ya tienen en marcha planes de fomento del alquiler, establezcan los mismos requisitos para conceder las ayudas. En la actualidad, el plan gallego de alquiler concede subvenciones en función de la renta del solicitante -no de la edad- que pueden alcanzar hasta el 60% -la cuantía máxima está entre 270 y 280 euros- del precio del alquiler, establecido en un límite de 480 euros. Además, los interesados pueden solicitarlo hasta cinco años, mientras que el plan para jóvenes durará uno menos. Táboas insistió, al término de la cita sectorial, que lo importante es que en Galicia se establecerán mecanismos de control que impedirán distorsiones en el mercado inmobiliario.
Distorsiones en el mercado
Sobre este último aspecto inciden los resultados del informe presentado ayer y realizado por la firma de calificación crediticia Standard & Poors. El estudio, del que informa Reuters, apunta que en España, Irlanda y Reino Unido la subida de los precios de casas e inmuebles en los últimos diez años ha sido de las más elevadas de Europa, lo que provoca que, en estos momentos, los mercados inmobiliarios de los tres países se encuentren un 30% sobrevalorados.