El equipo de Lotina levantó una fortaleza defensiva y arrancó un punto al talento blanco
27 feb 2011 . Actualizado a las 15:06 h.La resistencia tuvo premio. Un Dépor inspirado en defensa y con Aranzubia en plan Casillas amargó a un Madrid que tuvo mucho balón pero falto de puntería para descerrajar la cimentada zaga coruñesa. Mou se dejó un cuarto de Liga ante un equipo coruñés muy crecidito, por encima de su nivel habitual y con ese puntito de suerte (el Madrid hizo dos palos) que Lotina pedía a la diosa Fortuna.
Los dos equipos se desplegaron en un 4-2-3-1. Pero el dibujo del Dépor tenía mayor tracción trasera, pues Rodríguez se colocó en la mediapunta tras Sand. El equipo de Mourinho quiso la pelota desde el inicio. Pero con Xabi Alonso obstaculizado por Rodríguez en la distribución, el Real no pudo realizar un fútbol sinfónico, y recurrió a sus solistas. Nada nuevo bajo el sol, pues ese es su discurso habitual, el de un equipo en busca de estilo, rocoso pero partido en dos, los que defienden y los que atacan. La movilidad de Ozil, Kaká y Ronaldo, que se asociaron con Benzema, tuvo en permanente tensión al Dépor, que con su esfuerzo defensivo colectivo limitó el peligro a disparos lejanos. Solo Ronaldo encontró un resquicio para profundizar hacia el área, e hizo gol, pero fue justamente anulado por fuera de juego (min 28).
Concentrado en la defensa, al Dépor le costó atacar: intentaba articular las contras, guiadas por Guardado, pero la zaga blanca no se dejó sorprender. Y así murió el primer tiempo, con un Madrid dominador pero sin profundidad, ahogado en el sudor coruñés.
El segundo acto arrancó a una velocidad prohibida por el gobierno. Cristiano articuló su martillo y colocó a un paso de la contractura a Aranzubia, que la despejó a córner (min 46). Al instante, a Kaká le cayó un balón muerto en el área chica, pero volvió a aparecer el riojano.
El guión siguió siendo el mismo que en la primera mitad: a un Madrid perseverante y posesivo respondía un Dépor sólido en defensa. A los blancos se les iba la Liga y Mou recurrió a Adebayor, Di María y Granero. El Madrid pasó a jugar un ofensivo 3-1-3-3. Mejoró, pero siguió sin dar con el código PIN de la fortaleza herculina, pétrea como la torre de Hércules y con un guardián de leyenda, Aranzubia, que sacó dos guantes prodigiosos a disparos de Ronaldo de golpe franco y de Adebayor, este con la ayuda del palo. Con la madera chocó un misil cruzado de Ronaldo y con Aranzubia se encontró un gran disparo de Di María.
Árbitro: Fernández Borbalán (Colegio Andaluz). Tarjetas amarillas: Laure, Rubén Pérez, Sand y Riki, por el Deportivo; y Pep, Carvalho, Granero, por el Real Madrid.
Incidencias: Prácticamente lleno. cerca de 35.000 aficionados en el estadio de Riazor.
Aranzubia; Laure, Colotto, Lopo, Morel; Rubén Pérez, Antonio Tomás; Adrián (Lassad, min 71), Juan Rodríguez, Guardado (P. Álvarez, min 55); Sand (Riki, min 82).
Casillas; Ramos, Pepe, Carvalho, Marcelo (Granero, min 76); Alonso, Lass (Adebayor, min 60); Ozil, Kaká (Di María, min 60), Cristiano Ronaldo; Benzema.