Los «inmigrantes» anuncian un cambio en el atletismo español con cuatro oros en el nacional

DEPORTES

25 feb 2008 . Actualizado a las 02:10 h.

La tendencia es imparable. Cada vez son más los atletas nacionalizados que copan el podio en una prueba del Campeonato de España de atletismo, como sucedió ayer en Valencia y no habrá que esperar mucho tiempo para ver una selección española con mayoría de inmigrantes en sus filas.

El Campeonato de España de pista cubierta celebrado a lo largo del fin de semana en Valencia deja cuatro oros colgados del cuello de otros tantos nacionalizados, pero otros tres más también subieron al podio. Además, el único récord de España batido en el certamen lleva la firma de uno de ellos, el ecuatoriano Jackson Quiñónez, que consiguió batir su propia plusmarca nacional en los 60 vallas. Lo hizo además con la tercera mejor marca mundial del año (7.52). Tan solo le superan el cubano Dayron Robles (7.33), que estuvo en el Velódromo Luis Puig de visita, y el ruso Evgeny Borisov (7.44).

Quiñónez ya ha sido capaz de darle una medalla internacional al atletismo español en su debut en el Europeo bajo techo del Birmingham, el mismo camino que deben seguir los otros inmigrantes triunfadores en Valencia.

El oro de Josephine Onyia en los 60 metros lisos también estaba cantado. La nigeriana del Valencia Terra i Mar está llamada a liderar la velocidad femenina española, una disciplina huérfana desde siempre. Onyia debutó en estos campeonatos como española un año después de obtener la nacionalidad. Había llegado a España en el año 2004 en busca de un entrenador después de despuntar en su país. Con una tremenda envergadura física también apunta a cotas altas en las vallas.

Luis Felipe Méliz es otro cubano nacionalizado que se cuelga el oro en el salto de altura emulando a Joan Lino Martínez. Nacido en la localidad de Santa Clara llegó a Guadalajara formando parte del grupo de entrenamiento de la selección cubana y solicitó la nacionalización tras casarse con una española. Ganó con un salto de 7,83 metros, pero ya ha acreditado 8,43, una distancia que le puede meter en la lucha por las medallas en Pekín.

Todavía tendrá que esperar por su primera cita olímpica Igor Bychkov, un joven de 20 años nacido en Donetsk (Ucrania) llamado a destacar en el mundo de la pértiga. Residente en Barcelona desde los once años no obtuvo la nacionalidad hasta el mes de septiembre pasado y para celebrarlo saltó 5,40 para colgarse su primer oro como español.

También subieron al podio dos inmigrantes laureados a nivel internacional, como Joan Lino Martínez y Glory Alozie, los dos medalla de plata en longitud y 60 vallas, respectivamente. La joven Khandija Rahmouni, que nació en Marruecos pero que con un año de vida ya residía en Ibiza, fue tercera en los 60 lisos. Otra promesa a seguir de cerca.