Quejas de comerciantes por la elección del día de mercado para pintar
04 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Al bullicio habitual de los jueves de mercado en la plaza del Concello de Carballo se sumó ayer el de la máquina utilizada para borrar la pintura amarilla de la rúa Cervantes, que desde principios de octubre había estado reservada casi en su totalidad para carga y descarga debido a las obras de reforma del mercado municipal. Después de cinco meses, por la tarde empezaron a pintarse de nuevo las líneas de la zona azul que tanto reivindicaban los comerciantes. Sin embargo, también expresaron su malestar por la elección de un jueves para poner manos a la obra, dado que se trata de uno de los días de más actividad comercial y en el que más necesarios son los aparcamientos.
«¿Non lle choca que un día de feira estea todo vallado e con conos para que non se poida aparcar? ¿É esa unha maneira de dinamizar o comercio?», preguntó Esperanza Pan, concejala del PP y concesionaria de un puesto en el mercado, al alcalde. Evencio Ferrero coincidió con la edila, y aseguró que ya había trasladado su queja al sargento de la Policía Local. «Eu entendo que non era o día de cerrar ao aparcamento esa rúa. Dos erros tamén hai que aprender», dijo.
Las quejas se extendieron también al ruido de la máquina lijadora y al polvo que se levantó durante su utilización. «Esto es horrible, pero tampoco podemos protestar después de todo lo que pedimos que volviesen a poner la zona azul», manifestó una de las afectadas.
Incumplimiento
De hecho, la utilización de la calle Cervantes para carga y descarga provocó en su día numerosas protestas, que incluso llegaron al pleno a través de una iniciativa de Terra Galega, sobre todo porque el tiempo de estancia máxima de los vehículos se incumplía de forma sistemática. Pero los comerciantes de la zona también reivindicaban el mismo tratamiento que tiene la rúa Colón, que los días de mercado y feria se utiliza solo para carga y descarga de mercancías.
Por el momento no se prevén cambios importantes con respecto a la situación anterior. La reordenación de los estacionamientos en el entorno de la plaza del Concello obedeció en exclusiva a las necesidades creadas durante las obras de reforma del mercado de abastos, que están a punto de terminar. Aparte de la zona amarilla de la calle Cervantes -se mantendrá en la margen izquierda, como antes- se creó otra en la Gran Vía, que ahora continuará solo a lo largo de la entrada al edificio, según explicó el concejal de Tráfico, Benedicto Viña. Los placeros realizarán las operaciones de carga y descarga en el sótano del mercado, en tanto que el exterior se reservará para proveedores y para clientes, que con la nueva ordenanza de tráfico, pueden estacionar en zona amarilla cinco minutos.