Hostelería y comercio son los sectores con mayor índice de paro

BARBANZA

Cerca de 2.300 personas de la comarca buscan trabajo en alguna de estas dos ramas de actividad

20 ago 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

En plena crisis de la construcción, materializada en el desmantelamiento de grandes empresas y en el cierre de inmobiliarias, los mayores problemas de paro en la comarca, sin embargo, parecen ir por derroteros distintos a los de la edificación. Si se analizan los datos oficiales de los últimos doce meses se observa que hostelería y comercio son los sectores con mayor índice de desempleo en el área barbanzana, superando en siete puntos al registrado en la construcción.

En el último informe de la Consellería de Traballo, correspondiente a julio, la cifra de demandantes de empleo en ambas ocupaciones ronda las 2.300 personas, lo que representa el 81% de todos los inscritos en el sector servicios. No solo eso, sino que hay 300 anotados más que hace un año, y eso que el verano siempre es una época propicia para la contratación, como lo demuestra el hecho de que en abril el número de parados rondaba los 2.500.

Suma

La situación, aunque lejos de ser positiva, es bastante distinta en la construcción. Desde julio del 2007, la cantidad de desempleados aumentó en 161 personas, casi la mitad menos que en el comercio y la hostelería. En este momento figuran en los registros oficiales referidos a la comarca 1.031 demandantes.

Para alcanzar el volumen de desocupación que se registra en el ámbito de los servicios a nivel comarcal sería necesario sumar el paro de la industria y la construcción.

Firmas foráneas

El presidente del Centro Empresarial da Construción do Barbanza, Andrés Teira, manifestó que el hecho de que el desempleo hubiese aumentado menos puede deberse al hecho de que buena parte de las promotoras que hacen obras en la comarca son foráneas.

El directivo también señaló que las firmas de la comarca, en su mayoría de tamaño pequeño o medio, continúan trabajando. Además, dijo que las promociones que están empezadas tienen que acabarse, por lo que él cree que no podrá efectuarse un análisis en profundidad sobre cómo está el sector en Barbanza hasta que finalicen las edificaciones que estaban a medias cuando estalló la crisis.