En la carretera que da entrada a O Grove por Ardia (PO-316) se está ejecutando un proyecto de «seguridad vial» pero es precisamente eso, seguridad viaria, lo que falta en esta vía. Víctor Piñeiro Besada es uno de los vecinos damnificados por el estado del carril-bici, a su juicio «supuesto carril bici porque, como es tan peligroso, las bicicletas ya van todas por la carretera y la gente lo usa como acera». «Yo me caí en una ocasión cuando iba paseando con mi perra, también resbaló una señora mayor y hay más personas que se cayeron también», afirma.
El problema es que el material del que está hecho el pavimento es muy deslizante, de modo que cuando llueve se convierte en una pista de patinaje, afirma Víctor. Esta peligrosidad se incrementa con las hojas de los eucaliptos «que nadie limpia» y lejos de corregirlo, la nueva acera que se construye en el tramo sur de la carretera se está haciendo con el mismo material.
El tránsito por Ardia también se complica por la existencia de contenedores fuera de sitio -«hay un contenedor de papel en medio del carril», explica- y, unos metros más allá, «las aceras que dan acceso al colegio Valle-Inclán están todas ocupadas con maleza».
Al problema de seguridad se une el de la accesibilidad, especialmente en lo que se refiere a personas con movilidad reducida dado que, según sus datos, el 90% de los pasos de peatones de O Grove carecen de rampas para sillas de ruedas o carritos de los niños.
Este técnico superior en Información y Comercialización Turística ha recorrido su pueblo y hecho fotografías para documentar esta realidad y ahora la traslada a la opinión pública. Además ha enviado un escrito al Concello de O Grove solicitando que se tomen medidas, pero como nadie parece recoger el guante, se ha decidido acudir a la prensa. «No hago esto para ir contra nadie pero creo que es importante solucionar estos problemas. Creo que se debería aparcar el tema de la dotación de sistema GPS para tener localizados a los agentes y el sistema de grabación telefónica que graba las conversaciones de los vecinos con la Policía Local y emplear parte del dinero de todos los vecinos, que pagan sus impuestos, en dotar a O Grove de una buena infraestructura y eliminar estas barreras», añade este vecino.