Aprovecharon la ausencia de los dueños para entrar a media mañana
01 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Los ladrones se hicieron con joyas valoradas en más de 40.000 euros en una vivienda unifamiliar situada en la calle Limoeiros de Foz. El robo ocurrió el miércoles por la mañana, entre las diez y media y las doce y media, aprovechando que los propietarios se habían ausentado de casa.
¿El mismo grupo?
Al parecer, sospechan de dos hombres bien vestidos (traje oscuro), uno más joven y otro algo más mayor, que a esa hora estuvieron por la zona preguntando si había gente en la casa. Por los datos que han trascendido, podría tratarse de los mismos individuos que, haciéndose pasar por falsos funcionarios, habían entrado poco antes, a las diez de la mañana de ese mismo día, en la casa de una anciana de Ribadeo, a la que sujetaron para robar más de 300 euros y que después se fueron a Viveiro, donde a las 12.30 entraron en la vivienda de un matrimonio mayor situada en el casco urbano.
En Foz no sólo no se toparon con nadie en la casa sino que, al parecer, los dueños se habían dejado abierta la puerta trasera como hacían en otras ocasiones. Una vez dentro se supone que fueron directos a las joyas, que estaban guardadas en una caja normal (no era caja de seguridad) en el dormitorio de la propietaria, situado en la planta superior.
Luego bajaron, cogieron las llaves de la puerta de la salida, la abrieron y se fueron. Una de las cosas que llama la atención es que los intrusos no se llevaron ninguna otra cosa de la casa, pasando de largo delante de otros objetos de valor que había en la vivienda. Ello hace pensar que su objetivo estaba bien definido: iban al oro o al dinero.
Banda coordinada
No se puede descartar que sea un grupo compuesto por más gente, que trabajan coordinados, de manera que, por ejemplo, las joyas conseguidas en este robo, serían inmediatamente entregadas a otro personal de enlace, que se encarga de sacar fuera de la comarca el material, evitando así ser sosprendidos con el botín encima si se produce algún control policial. Se trata de profesionales que apenas causan destrozos en las casas, que desordenan lo menos posible y que se centran exclusivamente en los objetivos que se marcan. Digamos que trabajan un mercado determinado y a él se ciñen.
Lo que si sería de interés, ante la proliferación de robos que se están produciendo, es que la gente procurase extremar las medidas de seguridad, cerrando las puertas, no abriendo a desconocidos, estando alerta.