La policía carga en A Coruña contra los percebeiros del puerto exterior

Ramón Castro

GALICIA

20 dic 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La policía nacional cargó ayer contra un grupo de cuarenta percebeiros y pescadores coruñeses, que intentaron boicotear un consejo de administración de la Autoridad Portuaria y cortaron el tráfico durante dos horas en esta zona de la ciudad. Los marineros criticaron la «brutalidade» de la intervención, que se saldó con varios contusionados aunque sin lesiones de gravedad.

Los hechos comenzaron poco después de las 11 de la mañana ante el edificio de la Autoridad Portuaria coruñesa, situada en pleno centro de la ciudad. Para las 12 estaba fijada la reunión del consejo de administración del Puerto, y los marineros se apostaron frente a la sede institucional con el objetivo de que sus representantes fuesen recibidos «cinco minutos» por el presidente de la Autoridad Portuaria y el director de Recursos Mariños de la Consellería de Pesca.

Ante la negativa del Puerto a mantener este encuentro, los percebeiros intentaron impedir la entrada a los miembros del consejo de administración. Estos fueron llegando a partir de las once y media y, en varias ocasiones, la policía empleó la fuerza para abrirles el paso. En las escaleras exteriores del edificio hubo porrazos, patadas y empujones cruzados, ante la mirada atónita de los paseantes.

En torno a las doce y media, con el consejo ya en marcha, los marineros cortaron el tráfico en la Marina, en ambos sentidos de la circulación, tras lo que lanzaron bengalas y petardos y provocaron un colapso viario en A Coruña durante más de dos horas, ya que la policía no los disolvió, con una nueva carga, hasta las 14.45 horas.

Los manifestantes corearon consignas e insultos contra el Puerto y el Gobierno gallego, y aseguraron que denunciarán «a brutalidade sin precedentes da policía», en lo que calificaron también como «un acto fascista». «Esta es la respuesta que recibimos por parte del consejo: mandar a la policía a dar palos», subrayó Paulo Carril, uno de los portavoces del colectivo.

Destrucción de zonas

La protesta está motivada por las indemnizaciones que solicitan desde hace años los pescadores por la construcción del puerto exterior de punta Langosteira. La nueva dársena destruirá zonas de percebe, erizo y pesca de bajura. El colectivo, alrededor de 200 personas, cuantificó los daños en 27 millones de euros, calculando lo que dejará de percibir cada profesional desde ahora hasta el resto de su vida.

El Parlamento gallego y el Congreso de los Diputados aprobaron resoluciones de apoyo a estos afectados, pero sin fijar una cifra para la indemnización, mientras que la Consellería de Pesca les ofrece un total de 2,6 millones de euros. La Autoridad Portuaria rechazó indemnizarles atendiendo a un informe del Consejo de Estado.

Coincidiendo con esta protesta, también se desarrolló una concentración de empleados de la Autoridad Portuaria, en demanda de mejoras.