La falta de trenes en la estación lucense, los servicios ferroviarios que ofrece la terminal leonesa y el pésimo estado de las carreteras animan a algunos lucenses a buscar la alta velocidad en la provincia vecina
El Ayuntamiento dobla la partida que destinó el año pasado a conservar los 316 kilómetros de firme rodado de la ciudad. El presupuesto más elevado hasta la fecha permitirá asfaltar las vías que todavía están deterioradas y sobre las que llaman la atención los conductores
Jeanne Picard arropa a quienes luchan para que no se siga ejecutando la A-57 y confiesa que no entiende que el gobierno de Lores, «que es un ejemplo internacional a seguir, deje pasar algo así»