«Tener tranquilidad» es la receta para salir de la situación

La Voz

VIGO

29 abr 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Cuarenta y ocho horas después del partido frente al Levante, en el que se escapó una victoria que estaba amarrada en el bolsillo, el equipo empezó a preparar la próxima cita de Anoeta con la intención de aislarse de la verdadera situación del equipo. Los jugadores prefieren no ver para el calendario y se centran en tratar de sacar algo positivo ante la Real Sociedad.

Ismael Falcón admite que «la situación no es cómoda para nadie. No es grata. Salimos cabizbajos del partido, fue un palo bastante duro», y para recuperarse cree que la mejor receta es «que haya unión entre nosotros y no pensar en la clasificación». Reconoce que estas alturas cualquier discurso no tiene sentido porque «llevamos mucho tiempo diciendo lo mismo, y lo único que vale es no seguir cometiendo esos errores puntuales».

El portero céltico no cree que el sistema de juego de cinco defensas empleado por Eusebio en el último partido sea malo: «Llevamos poco tiempo jugando así y es pronto para valorarlo, peor lo cierto es que no nos crearon apenas ocasiones».

Borja Oubiña está siguiendo desde fuera la situación del equipo porque ve los partidos desde la grada y no está entrenándose con el grupo, pero tiene experiencia en este tipo de situaciones y ha vivido otros descensos, de Primera a Segunda.

El capitán opina que en estas circunstancias hay que «tener la mayor tranquilidad posible», aunque sabe que «no es fácil y se vio el otro día. Nos marcan un gol tras ganar de dos y se te escapa. Al faltar tranquilidad no haces lo que tienes que hacer. Cada uno tiene apretar lo que pueda», comenta.

Borja es de los que prefiere ver el vaso medio lleno: «Por suerte tenemos un margen de cinco puntos. Sin ser una situación cómoda, es la que hay y dependemos de nosotros. Las cosas están como están. No encadenamos dos victorias que nos permitan dar un salto de calidad», lamenta.

Espera que la temporada acabe cuanto antes y sin mayores contratiempos: «La cuestión es acabar la Liga y la temporada que viene estar en Segunda División», dice Oubiña. Pero se teme que va a haber que «sufrir hasta el final. Nadie se puede confiar».

Una victoria en Anoeta sería un paso de gigante, pero una derrota es muy peligrosa.