Un cuarto de competición le ha sobrado para convertirse en el equipo revelación del fútbol español. Después de militar en el furgón de cola durante los últimos años, el Mallorca ha vuelto a colocarse a rebufo de los grandes. Con una solidez impropia de un conjunto irregular, el cambio de rumbo lleva el nombre de Gregorio, que la pasada campaña inició su segunda etapa al frente del club, y los apellidos Arango y Güiza. Aunque en las islas, algunos apuntan al segundo como auténtico motor del cambio, ya que al fin y al cabo es la única novedad en el once inicial con respecto a la pasada campaña.
A sus 27 años (Jerez de la Frontera, 1980), Daniel Güiza ha vivido una carrera futbolística en continuo sobresalto. Ahora atraviesa una etapa dorada, al lado de su novia, la agente y polifacética Nuria Bermúdez, y brilla en el equipo en el que, de la mano de Luis Aragonés, debutó en Primera en el año 2000. Desde entonces, y hasta volver a cerrar el círculo, a este admirador de su paisano Kiko Narváez -últimamente, los goles se los dedica a su compañera sentimental- le dio tiempo a agotar la paciencia del paciente López Caro en el filial mallorquinista, de desquiciar a Aragonés cuando aprovechaba las charlas de vídeo para echarse una cabezadita en el anonimato de la última fila, y de fracasar en Huelva y en el Barça B. Quique Pina, agente y presidente, lo rescató para el Ciudad de Murcia, donde Güiza se ganó una segunda oportunidad. Dos años en el Getafe y el regreso a Mallorca para formar una rentable sociedad con Juan Arango, otro futbolista de condiciones tan excepcionales como irregular en el empeño.
A Juan Arango (Maracay, 1980) lo descubrió para el fútbol español Benito Floro. Ambos coincidieron (2001-02) en el Monterrey mexicano y lo volvieron a hacer en el inicio de la campaña 2004-05, ya en el Mallorca. Comparte irregularidad y cierta apatía con Güiza, pero en sus poco más de tres temporadas en España ha demostrado que a sus indudables condiciones como rematador -dinamita en las piernas- une la de ser un más que aceptable cabeceador.
Con su espectacular gol del sábado pasado al Espanyol, Arango ya ha igualado a Eto'o como máximo goleador (30) de la historia del Mallorca en Primera. Cinco tantos lleva el venezolano, los mismos que su compañero Güiza. En Primera, sólo la pareja Messi y Henry (7 y 4 goles) ha sido más productiva que la que forman Arango y Güiza (10). Algo que sólo está alcance de un psicólogo. Como Manzano.