A los 39 años, viuda y con dos niñas, tuvo que elegir entre el camina o revienta. Optó por algo mejor; por reír llorando por dentro, por criar a unas hijas resilientes y convertir su vida y su bar en puro teatro
La continuación del juicio del Karar pone de manifiesto el alto tren de vida del funcionario, el cual iba a su trabajo en un Audi Q5 en Aduanas de Vilagarcía de Arousa y levantó sospechas de Asuntos Internos