Contando pétalos para el Papa

L.Míguez PONTEAREAS/LA VOZ.

PONTEVEDRA

Los vecinos de Ponteareas se vuelcan con la alfombra que confeccionarán la próxima semana por la visita de Benedicto XVI a Santiago por el Xacobeo

30 oct 2010 . Actualizado a las 18:42 h.

Cajas viejas y telas apiladas, pero huele a verde. Entrar en el bajo de Comercial Tea es como un viaje al fondo de los bosques gallegos. Allí, hoja a hoja, pétalo a pétalo, convierten la naturaleza en los colores de la paleta de los alfombristas. Esta vez la obra de arte tiene un destinatario especial: el Papa. Sus manos tocan los verdes que la próxima semana pisará Benedicto XVI cuando atraviese la plaza de la Inmaculada de paseo por su visita a Santiago de Compostela.

Casi 150 metros cuadrados de pintura vegetal le esperarán en la pequeña plaza de la Inmaculada, lugar de la ruta por la que acudirá con la Curia hacia el mediodía. Espera una noche en vela para los 35 representantes que viajarán a la capital gallega y colocarán con mimo cada elemento.

El resultado final será un tapiz con la catedral de Santiago como referente, con el Papa a un lado y un peregrino mochilero al otro. Ambos estarán enmarcados por una greca tradicional coronada por los escudos del Pontífice, Ponteareas, Santiago y Galicia. «Se eligieron los elementos imprescindibles entre todos los diseñadores de las calles parque vamos a representar a toda la villa», recuerda Ángeles Lago, que lleva la batuta de los preparativos.

Recuerdos

Y es que, aunque la efímera alfombra se elaborará en a noche del día 5, el trabajo ha comenzado mucho antes. Un grupo de vecinos voluntarios arrima el hombro y el humor mientras dedica las tardes a deshojar ramas. De momento es el turno del material verde, luego llegarán los claveles para ponerle un toque de color. «Ahora es mala época porque no hay flores, como ocurre para el Corpus», recuerda Rosa Montenegro. Su virtuosa memoria es una enciclopedia de la celebración, en la que ya participaron su padre y su abuelo. Ahora ella toma el relevo e inculca la tradición a sus hijos, que también echan una mano con los preparativos para el Papa.

«Su padre, el ebanista Emilio Montenegro, era uno de los mejores diseñadores. Estuvo en Alemania y otros países haciendo alfombras», recuerda una de las vecinas en susurros mientras Rosa habla de morriña y de los viejos tiempos. Muchas de sus compañeras completan su discurso con recuerdos de viajes a Marín para pedir las hortensias de la Escuela Naval o a otros puntos de la comarca. Ahora es más sencillo, el Concello pone a su disposición los materiales.

Mientras trabajan con ellos recuerdan los viajes de los alfombristas a Roma y la última vez que prepararon un tapiz para el entonces Papa, Juan Pablo II, en su última visita a Santiago de Compostela. Para que todos los vecinos puedan disfrutar de la jornada, el Concello pondrá autobuses, aunque no se podrá acceder a la plaza de la Inmaculada.