¡Marchando una de Hot Pot!

PABLO PORTABALES PERIODISTA

YES

20 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Nos quedamos pasmados. Los cocineros asiáticos empezaron a introducir productos en la tartera. Primero tacos de mantequilla en grandes cantidades. Después zanahoria, cebolla, normal y morada, o puerros previamente troceados. Champiñones, calamares, gambas… Pierdo la cuenta. En unos segundos el chef oriental puso la tapa, y a cocerse todo durante unos diez minutos. Está técnica se denomina Hot Pot y tiene la particularidad de que la preparación, bien sea de marisco, pescado o carne, se hace en la mesa. «Todas disponen de un hornillo de inducción e incluso se puede colocar el mantel encima y no se quema», explican los propietarios del restaurante Simbo de la coruñesa plaza de Cuatro Caminos.

EVOLUCIÓN ASIÁTICA

Para presentar este sistema y el renovado local celebraron una fiesta en la que no faltaron unos riquísimos rollitos primavera. Hacía años que no tomaba unos tan buenos. A su propietaria, Fang Fang, y a su marido, Lin, los conozco desde hace años. Siempre apostaron por ir un pasito por delante y ya cuentan con varios locales. Los padres de Fang se puede decir que fueron de los primeros en montar un restaurante chino en A Coruña. Ahora poco se parecen a aquellos iniciales, tanto en la decoración como en la carta, cada vez más oriental o asiática que cien por cien china. De hecho en la fiesta en cuestión sirvieron un sushi fantástico. Entre Hot Pots, rollitos, sushis y otras viandas se coló un dragón portado por un grupo de los que habitualmente animan el carnaval.

UNA TAPA DE PREMIO

Y ya inmerso en cocina de ojos rasgados, les presento la tapa que fue ganadora del primer concurso de recetas asiáticas de España. Lo curioso es que su creador es Fernando Estévez, un ingeniero de caminos coruñés que desde hace unos años se dedica a la hostelería y regenta dos negocios. En uno de ellos, el Roots de la plaza de Vigo, tiene colgado el cartel que lo acredita como ganador. «Ya habíamos presentado una tapa similar al concurso Picadillo, pero la mejoramos», comenta mientras Sheila, la cocinera, prepara una para que la pruebe. Es una gyoza de pescado (en el Simbo también sirvieron alguna empanadilla asiática), pero la masa está elaborada con piel de bacalao. «La deshidratamos y después la trituramos y hacemos una masa como una oblea. El relleno es un pilpil de bacalao y curri verde», explica. Y ya solo me quedaba probar esta tapa asiática feita en Galicia, que realmente estaba muy buena, en especial a los que nos gusta el bacalao. Estoy amarillo.