Ellos son serieadictos

Antonio Mosquera, N.S.

YES

PACO RODRÍGUEZ

YONKIS DE LA TELE Correr ya no es imprescindible para hacer un maratón. Hoy en día hay otras maneras de hacerlo, igual de exhaustivas, y sin levantarte del sofá. Y es una buena manera de ponerte al día en «Breaking Bad» o «Juego de Tronos». Pero ¡cuidado! Es adictivo.

23 jul 2016 . Actualizado a las 05:15 h.

Lejos ha quedado ya para algunos aquella época en la que cogíamos el sueño mientras escuchábamos las tertulias deportivas radiofónicas. Ahora, cuando nos acostamos, llevamos con nosotros el portátil o la tableta y ponemos un capítulo (o dos) de alguna serie. Precisamente esta es la técnica que emplea Luis para irse a la cama, aunque reconoce que no siempre es muy eficaz: «A veces es contraproducente y lo que obtienes es el resultado adverso, te enganchas. Siempre que me incorporo en la cama y pongo el portátil sobre mi regazo sé que van a caer cuatro capítulos como mínimo». Reconoce, entre risas y sonrojo, que una vez se pasó en vela toda la noche e incluso «lató» a clase por no dejar a medias una temporada de Breaking Bad.

Pero Luis no solo ve series para dormir. De vez en cuando organiza maratones en el sofá de casa con algún colega en los que, reconoce, siempre quedan secuelas: «Es como hacer un vuelo transoceánico, te rompe la rutina del sueño».

CAFÉ Y «CÓMO CONOCÍ...»

¿Pero pueden las series generar tanta adicción? «Cuando tu compañero de piso vuelve a casa después del fin de semana y te dice ‘me fui hace tres días y aún estás así’, te das cuenta de que sí estás enganchado». Un poco diferente es la relación de Andrea con las series. Pone algún capítulo siempre que tiene que quedarse hasta tarde para hacer algún trabajo, de compañía. «Estudio Arquitectura y tengo que hacer muchas maquetas que requieren que esté activa. Cuando estoy en la uni me pongo mi playlist de música motivadora, pero por la noche, en casa, necesito algo más». Y la combinación perfecta es «mucho café, Red Bull y Cómo conocí a vuestra madre. Al final los Ted, Marshall y compañía se convirtieron casi en mi familia», comenta entre risas.

Después continuó con Juego de Tronos, Narcos y Anatomía de Grey. «Era muy curioso, porque había momentos en los que estaba operando con un cúter al mismo tiempo que en la serie. Aunque yo sobre el cartón pluma, claro». Incluso en una ocasión Andrea llegó a consultar en una web el tiempo de su vida que había empleado en ver series: «Ahora hay webs para todo. Seleccioné todas las series y todas las temporadas que había visto desde pequeñita y el tiempo que me calculó fueron 3 años. ¡Dios mío! Tengo 22 y he empleado 3 en ver series. Cuando acabe la carrera pienso tirar el portátil».

LA REGLA DE LOS 3 INTENTOS

Las series también han atrapado a Dani (sus amigos le llaman Cheroki), que reconoce que lo más difícil es mantenerse despierto. Pero Cheroki tiene una norma para saber cuándo hay que parar: «Es mi norma de los tres intentos. Cuando intentas ver un mismo capítulo y no lo consigues porque te quedas sopa, a la tercera vez es el momento de parar. Es como en el béisbol, strike tres y a la cama».