El tudense considera que esfuerzos como el suyo, con jornadas maratonianas de trabajo y entrenamientos, no tienen apoyos ni de federación ni instituciones
05 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Iván Alonso Lage (Tui, 1985) regresó a casa con dos medallas más del Mundial de piragüismo en la modalidad de maratón y ya tiene nueve. La de plata y bronce sumadas en Rumanía las consiguió compaginando su trabajo en la crepería familiar con el entrenamiento y sorteando los obstáculos derivados de la deficiente logística y de la falta de ayudas. Pese a todo, a sus 36 años, el deportista del Piragüismo Olívico, ya piensa en redondear el círculo con un décimo metal.
-¿Cómo valora su actuación en el Mundial de Rumanía?
-Contento, porque después de bastante tiempo sin competir, poder conseguir las dos medallas era bastante difícil. Había mucho nivel en el Mundial, porque había gente que llevaba bastante tiempo parada.
-¿Cuál de las dos le sentó mejor?
-La plata de la distancia larga, que fue la que preparé. A la prueba corta me presenté en el selectivo, clasifiqué y la afronté en el Mundial, pero no era mi objetivo principal.
-¿Recuperó bien de una prueba a otra?
-La verdad es que sí. La prueba corta es muy explosiva y el desgaste explosivo se recupera muchísimo antes con respecto al desgaste de una prueba larga.
-¿En algún momento de la prueba larga vio opciones de oro?
-Hubo opciones de oro, pero tal como transcurrió la carrera, yo no pensaba en ello, sino en romper el grupo. Me puse de acuerdo con Pedersen (a la postre ganador) para hacer unas primeras vueltas muy duras y conseguimos entre los dos romper el grupo y hacer que gente con mucho nombre y medallas en mundiales no fuese capaz de seguir el ritmo y quedase casi a tres minutos de nosotros.
-Cuando se rompió el grupo, ¿fue un mano a mano?
-Mantuvimos el ritmo, respetando cada uno un tiempo para tirar para que nos alcanzaran por detrás. Al final, el danés llegó con un poco más de chispa y lo demostró en el último porteo, en que se me escapó.
-¿Qué le dice haber conquistado nueve medallas mundialistas?
-Cuando uno comienza, nunca sabe a dónde puede llegar, siempre tienes el sueño de conseguir una medalla, pero nunca se sabe. Yo siempre digo que te preparas para un oro, pero realmente sumar es lo más importante. Estar aquí, disfrutar de lo que estamos haciendo.
-Y ahora, a por la décima.
-Sería un buen número. No sé si será posible, si lo superaré o me quedaré en nueve, porque tal y como están las cosas en el deporte, nunca se sabe, especialmente con nuestra Federación, que está un poco descolocada.
-¿Cómo hace para compaginar el entrenamiento con el trabajo?
-Tengo una crepería y compagino deporte y trabajo con la ayuda de la familia. Sacando horas de todos los lados, especialmente ahora, para preparar el campeonato del mundo en agosto y septiembre, que además era la época más complicada para mi negocio. Para mí este año fue muy duro, con días de siete de la mañana a dos de la madrugada. Era entrenar-trabajar y, por desgracia, bastantes semanas viendo muy poquito a mi hijo.
-¿Cómo se organizaba?
-Entrenaba a las nueve de la mañana, una semana en Pontevedra y otra en Tui. Entro a trabajar a la una y media hasta las cuatro y media de la tarde, luego vuelta a entrenar y a media tarde volver a trabajar hasta la una y media de la madrugada que llegaba a mi casa.
-¿Y va a mantener mucho tiempo este ritmo o es imposible?
-Creo que mucho tiempo va a ser imposible. Ya no solo por el ritmo, que visto lo visto, lo puedo aguantar, pero creo que llega un punto que los deportistas tenemos una vida que afrontar y disfrutar. No ves que un esfuerzo tan grande como pueda ser mi caso, porque para mí sí que es un esfuerzo, tenga un apoyo ni por parte de la Federación ni las instituciones lo suficientemente importante como para tener una reducción de jornada para no tener que depender de trabajar tantas horas y compaginándolo de un modo tan difícil. Creo que los deportistas no duramos más en el tiempo por la falta de estas ayudas.
-¿Con 36 años se ve con cuerda para rato o ya no?
-Hay gente que está remando mundiales con más edad, esto va en función de cómo y en qué condiciones estés entrenando, cuantas mejores condiciones tengas, mejor vas a estar en un futuro.
«Pasamos varios calvarios, desde la mala comida a no tener habitaciones y tener que buscarnos hotel»
Hay disciplinas en donde los deportistas viven en una especie de burbuja y solo tienen que dedicarse a competir, pero ese no es el caso de los piragüistas. Ir al Mundial de Rumanía a Iván Alonso le costó dinero, y eso que el consiguió las dos plazas directas, pero ante la deficiente manutención tuvieron que comprar comida e incluso buscar por Internet un hotel más acorde con sus necesidades.
Un espacio en donde, por cierto, no había sitio para toda la expedición, argumentos por los que el tudense reclama cambios en el seno federativo a nivel estatal.
-¿Hubo ayudas económicas para ir al mundial o tuvieron que costearlo de su bolsillo?
-Podían remar dos representantes en cada categoría y el que se clasifica primero (su caso) va financiado y el segundo se lo tuvo que costear, pero la Federación pasa por momentos complicados, la gestión no es buena, y hemos pasado por bastantes calvarios en este campeonato, desde una mala comida, llegamos al hotel y nos dimos cuenta que no teníamos habitaciones para todo el equipo, el hotel en el estábamos era de muy mala calidad para afrontar una competición de este nivel y de hecho, tuvimos que buscarnos uno a través de una página de Internet. Se complicó la cosa por ahí e igual tuvo que ver en el resultado deportivo del equipo nacional. En vez de mejorar vamos a peor y necesitamos un cambio para que no se queden deportistas por el camino, especialmente los más jóvenes.
-¿A usted le costó dinero el campeonato pese a que se había ganado las plazas como primero?
-Sí, porque al final para llegar en buenas condiciones tuvimos que comprar comida y cubrir necesidades básicas que en condiciones normales debería cubrir la Federación.