Un análisis pone precio por primera vez a la negociación que salvó al hospital
02 sep 2019 . Actualizado a las 14:15 h.El Hospital Povisa salió del agujero del preconcurso de acreedores en diciembre, después de pactar con el Servizo Galego de Saúde una mejora en el concierto por el que atiende a una parte de la población de Vigo. Ese pacto supondrá un incremento anual de unos cuatro millones de euros. Así se desprende de un reciente informe del Consello de Contas. Hasta ahora, el Sergas no había querido poner cifras al cambio en el concierto.
Este órgano independiente, que fiscaliza las cuentas de la Administración gallega, hizo un estudio monográfico del concierto de la sanidad pública con el mayor hospital privado de Galicia. En su análisis, elabora una simulación sobre los cambios que introduce el nuevo concierto. Toma los dos primeros años de vigencia del contrato anterior y a ellos les aplica los cambios introducidos. El concierto había entrado en vigor el 1 de septiembre del 2014. Según esa simulación, con el nuevo concierto, Povisa habría ingresado 3,4 millones de euros más en el año que va de septiembre del 2014 a agosto del 2015, y 4,4 millones de euros más en los doce meses siguientes. En total, en esos dos años, 7,8 millones de euros más. De lo que se puede concluir que las modificaciones rondarán los cuatro millones.
Hasta el año 2014, Povisa cobraba según lo que hacía: si operaba más, hacía más consultas y practicaba más pruebas, también recibía más dinero. Desde entonces, el hospital y el Sergas aceptaron un pago per cápita: por cada persona adscrita al hospital, una cuota; al margen de que usase mucho o poco sus servicios. En el 2014 se fijó una tasa de 540 euros por persona y año. Pero con el nuevo acuerdo que entró en vigor el 1 de enero de este año, después de que el centro sanitario del grupo Nosa Terra presentase el preconcurso de acreedores, esa cuota se bajó. Ahora son 504,79 euros por persona y año. La reducción de la cuota significa que en los dos años analizados Povisa habría ingresado 9,2 millones de euros menos.
Pero el pacto incluía otro cambio. A cambio de reducir la cuota (llamada cápita) el Sergas suministra la medicación ambulatoria -la de pacientes que no están ingresados- y la medicación de alto impacto -las novedades terapéuticas, que es lo más caro-, salvo el hospital de día, que son las quimioterapias. Todo lo anterior hasta ahora lo pagaba Povisa. Por la medicación ambulatoria, durante los dos años analizados el hospital habría cobrado 16,5 millones, y hasta ahora no recibía nada. Y por la medicación de alto impacto habría recibido 1,3 millones más.
Hay otros cambios con los que pierde, pero su impacto económico es menor. En total, el hospital habría recibido 7,8 millones más con el nuevo concierto. En el 2015 Povisa declaró unas pérdidas después de impuestos de 3,98 millones. Un año después, fueron 3,23. Todo el resultado negativo se lo ha atribuido directamente al concierto, de modo que con la modificación podría compensar sus pérdidas.
El propio Consello de Contas dice que durante el concierto Povisa ha sufrido una reducción progresiva de su patrimonio, por las pérdidas reiteradas, al incremento de los costes y a haber mantenido, pese a ellos, su cifra de negocio. El segundo problema ha sido de liquidez, ya que el Sergas regularizaba cada cuatro meses los costes de la medicación de alto impacto, de forma que era el hospital el que la adelantaba.